Un restorán escuela transformador de realidades. Camino a Villavicencio, en el Km 10 de la Ruta 52, nuestro vecino Omar Peralta enseña a cocinar y gerenciar un sueño propio, y así cambiar la realidad  de las personas que integran este emprendimiento social, por sí mismas.

Por Adriana Sayavedra

Gestión Nativa es una asociación civil sin fines de lucro que impulsa una serie de emprendimientos destinados a dignificar y fortalecer a personas y familias de la zona. El disparador fue el vivero de plantas nativas -aprovechando lo que quedaba del vivero de Minetti-, luego llegó un taller de arte textil y finalmente un restorán escuela con fines sociales, que mutó desde la idea original de vender pan, tortitas y empanadas para aprovechar la cercanía con la ruta.

Ubicado en la zona llamada de los cinco mil lotes, zona de barrios vulnerables del departamento de Las Heras, estos emprendimientos sociales funcionan en tres hectáreas de tierra cedidas en comodato por la empresa constructora Holcim -que compró la antigua cementera Minetti, ex dueña de la propiedad-.

El contacto con la naturaleza sumado a la comida sencilla y auténtica, le dan sabrosura al lugar.

Nuestro vecino Omar llegó a integrar este proyecto invitado por Héctor Fernández, uno de los coordinadores de Gestión Nativa. Fernández explica que “el foco del proyecto es el empoderamiento de las personas; nuestra herramienta, los emprendimientos. Buscamos que los emprendedores puedan llevar lo aprendido a otros emprendimientos, a su vida familiar y personal”.

Por su parte, Omar, cocinero, maestro y, por si fuera poco, músico de la Orquesta Filarmónica mendocina, cuenta: “Esto había que abrirlo y no charlar tanto. Así es que, como las chicas interesadas en trabajar no tenían capacitación previa, comenzamos armando un plan de acción para ponerlo a funcionar cuanto antes, aunando cocina y capacitación en simultáneo: los martes se hace la prueba del menú propuesto, se aprenden las técnicas de cocción y los domingos se hacen las prácticas, atendiendo a los clientes”.

Apadrinado por el dúo musical Orozco Barrientos, que amenizó la fiesta de inauguración, este restorán escuela de origen social, también cuenta entre sus simpatizantes a reconocidos chefs mendocinos, como Lucas Bustos y Patricia Suárez Roggerone, quienes visitaron el lugar varias veces para capacitar a los emprendedores y otras tantas los invitaron a sus restoranes para que aprendieran mirando.

Todos aquí tienen grandes sueños de proyección: “Cerrar un salón más grande, estilo ranchón de adobe, e incluir una casa de té; mantener una huerta para proveernos a nosotros y a otros restoranes, armar un servicio de catering con mozos y también desayunos para el personal de las empresas cercanas”, nos cuenta Omar. Y hacia allá tienen dirigida voluntad y acción.

El maestro Omar Peralta y Fabiola, acunan una carne al malbec en disco de arado.

Combinar almuerzo de cocina regional y ayudar con un proyecto social

Si se  decide un domingo a hacer el paseo hasta las tierras del Ranchón Nativo -recomendamos reservar previamente-, podrá encontrar platos típicos de nuestra cuyanía. El menú consta de tres pasos -entrada, plato principal y postre-, de tantas cosas ricas según el día como Empanadas Nativas, Bruschetas de morcilla a la chapa y cebollita de verdeo, Vacío al Horno de Barro, Chivito a la llama con verduras al rescoldo, Carne al malbec en disco de arado, Canelones de Espinacas y ricota, Costeletas a la chapa con vegetales, Manzanas al cajón de hierro con helado de americana, Vigilante Nativo (el tradicional postre más nueces y arrope de chañar).

Una excelente opción para quienes disfrutan de los entornos apacibles, en contacto con  la naturaleza. Y un dato no menor: mientras tanto, ayuda a construir un espacio de dignidad a través del trabajo y la esperanza para muchas familias de la zona.

Cuadril al disco y papas rotas, uno de los platos típicos.

Para reservar, especialmente si es vegetariano o celíaco, debe comunicarse al:0261 15 655 0207

También atienden reuniones privadas, grupos de turistas en cualquier día de semana.

“¿Cuál es el valor de una acción social concreta? ¿Cuál es el valor de tu elección?

Elegir un restaurante escuela de origen social para almorzar este domingo y así fortalecer los procesos de aprendizaje y empoderamiento de un grupo de personas que durante toda la semana se esfuerzan por preparar el mejor servicio para recibirte”.

Sashico, fieltro nuno, shivori. Fibras naturales y técnicas ancestrales. Un recorrido ancestral, desde la puntada, los motivos geométricos, a la libre interpretación, utilizando diferentes materiales y técnicas.

SASHICO, bordado japonés. Puntadas simples y motivos geométricos. Bordado de un objeto y una prenda. 3 jornadas.

Miércoles 14,21 y 28 de enero. Horario: 9:30 a 12:30 hs. Valor: $ 450 (incluye los materiales).

Fieltro NUNO, sobre seda o gasa de algodón, inspirándonos en los motivos sashico. Es necesario tener experiencia en fieltro.

Viernes 16 de enero Horario: 9:00 a 13:00 hs. Valor: $ 400 (incluye los materiales, seda natural y lana). $ 320 (traer seda natural, gasa algodón y lana).

SHIBORI, motivos geométricos a partir de teñidos con reserva.

Jueves 29 de enero. Horario: 9:30 a 13:00 hs. Valor: $ 300 (incluye materiales).

Introducción al fieltro, paño simple, inclusión de otros textiles, formas modeladas.

Jueves 15 de enero. Horario: 9:30 a 12:30. Valor: $ 250 (incluye materiales)

Objetos Deco. Diseño sustentable. Un recorrido por diferentes técnicas y materiales.

Almohadón Miguelito, en lana merino. Técnica mixta.

Dos jornadas. Viernes 23 de enero 9 a 13:00 hs. Segunda jornada a confirmar entre los asistentes. Valor: $ 400 (incluye lanas) traer agujas.

Sellos + textiles + madera.

Viernes 30 de enero 9:00 a 13:00 hs. Valor: $ 300

Objetos tejidos. Introducción a tejidos gigantes. Muestras de cestas, puf, alfombras… Técnicas Crochet y dos agujas.

Dos jornadas. Viernes 6 de febrero. 9:30 a 13:00 hs. Segunda jornada a confirmar entre los asistentes. Actividades para niños y adolescentes. Diseño sustentable.

Sellos + textiles+reciclar. Creación de un sello y estampar en textiles y prenda.

Sábado 24 de enero. Horario: a confirmar.

Bordados, inspirados en la simple puntada Sashico, bordado sobre estampa o prenda.

Sábado 31 de enero. A confirmar.

Informes: tererichard@gmail.com

Creciendo Juntos es un espacio psicoterapéutico destinado al acompañamiento de niños y adolescentes con Discapacidad Intelectual leve y moderada, Síndrome de Down o Trastorno del Espectro Autista. En el lugar, a cargo de la licenciada en psicología Carla Elizabeth Arenas Franco, se trabaja en el desarrollo y entrenamiento de habilidades sociales y la estimulación cognitiva de manera persistente.

En este mejoramiento de la calidad de vida de las personas se busca favorecer la participación activa en la sociedad, transmitir valores, brindar orientación y acompañamiento a la familia, incrementar la autodeterminación, la independencia y el respeto de derechos.

Para más información, creciendojuntos@gmail.com; 2615633313 o 2615904267. Dirección: Formosa 427, 1° piso, depto. 1, Ciudad de Mendoza.

Hola! Me perdí por Chacras de Coria y me llevaron al Hospital Veterinario Modelo, que mi dueño me busque allí. El teléfono de contacto es 4964748.

El jueves 15 de enero, a las 20 hs., se recordará a las víctimas del atentado de Charlie Hebdo en la Alianza Francesa de Mendoza, Chile 1754 de Ciudad. El encuentro es organizado por FOPEA, la Alianza Francesa y el Consulado de Francia en Mendoza.

Cien Peces Piensan es el nombre de la banda de rock que este año quedó entre las ocho finalistas a nivel nacional para grabar su primer videoclip profesional junto a Canal Encuentro. Los invitamos a descubrir un poco más de esta unión familiar cargada de sonidos.

Desde su primera aparición como banda, los primos causaron revuelo. Para empezar, porque cuando Sasha Nazar Espeche (bajo), Manuel Nazar Tomba (batería) y Joaquín Ferreira Nazar (guitarra) salieron al escenario tenían cerca de 15 años y lo hicieron con canciones de sus bandas favoritas a tres voces: Rage Against The Machine, Soda Stereo, Radiohead, Divididos o Spinetta. Luego porque el nombre “Renacuajo” que los identificaba en sus inicios mutó al de “Cien Peces Piensan”, lo que supuso un cambio de repertorio, estilo y madurez de la banda, que cierra un 2014 cargado de logros. De aquel proyecto que empezó como un juego de sonidos, poco queda, salvo el espíritu que los lleva a reinventarse para darle vida a un rock pop con canciones de autoría propia con las que recorren festivales y bares del país, además de experiencias en Chile.

“Nuestro primer toque fue en la Vendimia de Chacras de Coria en el 2008, en la Plaza”, dice Joaquín sobre los comienzos del trío nacido en reuniones familiares con la música como condimento presente. Los sábados, en la casa de sus abuelos en el Pasaje Nazar, al incentivo de las milanesas a la hora del almuerzo se sumaba el momento de los ensayos, con la esperanza de que en algún momento saldrían a los escenarios para compartir su música con el público. Luego de un año de tocar versiones de sus bandas favoritas, los jóvenes se lanzaron a la tarea de componer temas propios y cerrar fechas en la provincia. Fue así como en 2012 pre produjeron su primer disco -“Fuera del tren”-, que grabaron en 2013 en Fader Records y materializaron en 2014, luego de un “largo proceso”, según ellos mismos califican. Las doce canciones que integran el álbum fueron vueltas disco gracias a la ayuda de sus padres, el Ministerio de Cultura de Mendoza y el Movimiento Independiente de Músicos Mendocinos.

Las emociones de sus integrantes, sus vivencias y aprendizajes forman parte del abanico de letras de la formación que este año quedó entre las ocho ganadoras del concurso “Mi banda”, organizado por Canal Encuentro y gracias al cual accedieron a la realización profesional del videoclip de “Títere” luego de la votación del jurado. Un año antes, los chicos viajaron a Chile para presentar el disco en Santiago, Viña del Mar, Reñaca y Valparaíso a bordo de una traffic que compartieron con Leo Lémoli, manager de la banda, Fausto Mazzarella, fotógrafo, y Pablo Morán, sonidista. En bares y paradores de distintas playas se dieron el gusto de tocar y ganar nuevos seguidores. Con intenciones de formar un sello colectivo junto a otros músicos amigos, los Cien Peces Piensan aseguran que el apoyo mutuo es vital para la escena joven mendocina.

“Como banda somos un equipo sin líder”, aseguran los integrantes de este cardumen pensante que sueña con viajar con la música.

Para conocer más sobre la banda: FB/Cien Pece Piensan y para escuchar su música: cienpecespiensan.bandcamp.com

Adrián Yacopini y Ricardo Torlaschi terminaron la décima etapa del Dakar. Lo hicieron en el puesto 41° quedando 34 en la clasificación general.

Hasta el 7 de marzo continúa abierta una muestra de dibujos realizados en lapicera por el joven chacrense Fernando Santacroce. “Staring blue” es el nombre de la exposición abierta al público con entrada libre y gratuita en Vararte, Chile 230, Ciudad de Mendoza.

“Las penas son de nosotros, las vaquitas son ajenas”,  decía Atahualpa…

Por Nicolás Sosa Baccarelli

Empinado oficio el del arriero… Sin ferrocarril, sin camión, los arreos por tierra eran, años atrás, la única forma de trasladar de un punto a otro, por muy distantes que estuviesen ambos, la hacienda.

Desde que el ganado sale de la estancia hasta que ingresa a la del comprador o bien al matadero, el trabajo del arriero (resero, o tropero, siendo términos aproximadamente equivalentes) exhibe un grado de dificultad único entre los trabajos de campo.  Entre los autores que se han dedicado al asunto, sugerimos la lectura del la obra “Trabajando de a caballo” de Roberto C. Dowdal, y, principalmente la “Instrucción del Estanciero” de José Hernández. Dice el autor del Martín Fierro: “Arreando hacienda es donde se prueba el conocimiento del hombre de campo (…) En este trabajo tiene el hombre que dar de sí todo lo que pueda dar…”  y termina ofreciendo una lujosa comparación: El arreo es al hombre de campo, lo que la tormenta al marinero.

En la obra citada el poeta y ensayista hace un minucioso estudio de este trabajo. Comienza con una clasificación básica del ganado: “de cría” y “tropa” (animales destinados al matadero), debiendo poner mayor delicadeza en la conducción del primero.  La hacienda de cría debe arriarse despacio, las jornadas deben ser cortas, y las paradas de descanso, muy seguidas “porque todo lo chico sufre mucho y extraña la marcha”. Previamente el arriero ha contratado peones de acreditada experiencia para la tarea, estos van a ponerse bajo sus órdenes durante la marcha. Su lugar en el arreo, es el más incómodo: debe ir atrás, vigilando el desarrollo completo, el trabajo de los peones que vienen por las orillas “conteniendo”, del que viene “haciendo punta” (hombre que debe conocer muy bien el terreno y conducir toda la animalada al ritmo correcto de acuerdo a las ordenes del capataz).

El arriero viene detrás, vigilando y alentando a los animales que van quedando rezagados y que siempre son los mismos: los más pesados, los más chiquitos o en peor estado, las vacas recién paridas. El instrumento para “castigar” se llama -precisamente- “arreador”, siendo el arriero el único autorizado a llevarlo; por eso será más allá de su utilidad práctica, un bastón de mando, un símbolo de su autoridad. En el arriero recaen todas las decisiones y responsabilidades: dónde hacer las paradas, a qué ritmo moverse, encerrar o no, dónde hacer que los animales coman y tomen agua. Maneja intereses ajenos y depende de su sabiduría y experiencia el éxito del arreo, es decir: que la hacienda llegue a destino, con la menor cantidad posible de pérdidas  y en buen estado.

Finalizo con esta belleza de Hernández: “El acarreador de ganado tiene la costumbre de usar un grito especial y una especie de canto monótono que entretiene al animal en el camino… los rondadores de hacienda prestan mucha atención a la clase de grito que ha de emplearse… Esos gritos son únicamente interjecciones en A-E-O y no emplean jamás las que suenan en I-U porque ellos dicen que inquietan y alborotan a los animales.

La verdad es que con sólo oír silbar o cantar a un hombre que lleva hacienda, se conoce en el acto si es práctico en su oficio.”

Héctor Araujo, el Patón Díaz, Ramón Moya -más conocido como el Chinoto-, Cholo Díaz, el primer amigo del Patón cuando llegó a estos pagos en 1984, y Sonia. Sentados: Alejandro Leiva, Luis Homsi.

Gladys, Claudia, Marcela, Marina; la cumpleañera, torta en mano; Liliana, Raquel y Vanina. Se larga el brindis con champagne y enseguida las rondas de mate.

Los niños. Marina, Rodrigo, Carolina, Melina, Noelia. Eugenia, Kevin, Santiago, Juan, Santino y Darío.

El bautismo de Simón

El tío abuelo Flavio Arienzo,el abuelo Cacano con el primer nieto en brazos, el tío Facundo, la bisabuela Marina y el flamantepapá, Matías Cabanilllas.

Joven familia. Agustina López, Matías y el pequeño Simón Cabanillas.

En la pelu para festejar sus 100 años de vida.

Osvaldo César, o El Cumpita, y Rosa.

Los hermanosDiego y Francisco Casso festejan los 29 de Fran con su novia.

Los carpinteros de la Pancho

Los alumnos de la Pancho Correas mostraron sus primeras producciones del flamante taller de carpintería, todo reciclado. El proyecto articula el cuidado del medio ambiente y la salida laboral. ¡Felicitaciones a los futuros emprendedores!

Sergio Godoy, la regente Josefina Daract, Fabricio Aquistache, la directora Denise Cané y Cintia Bloise.

Festejo de los 38

Los compañeros de la Promoción 1976 del ICEI, festejaron su 38 aniversario, nuevamente en lo de Zanettini. El anfitrión, quien se encuentra de festejos corridos, ya que este año se cumplieron 43 de la increíble aventura que vivió como integrante de los Niños Cantores de Mendoza cuando viajaron a Tokio, de la mano de su director, Víctor Volpe, se portó de maravillas yresultó elegido “el anfitrión de la temporada”.

Patricia Palomo, Mónica Guerra, Herta Poquet, Claudia Yañez, Federico Zanettini, Estela Zogbe, Roxana Bertolo, Mónica Acosta y Adriana Sayavedra.

Bendita tú eres. Carlos Stipech -tranquilo-, Carlos Nazar, Ariel de la Torre, Sergio De Souza, Federico Zanettini, Roxana Bertolo y Juan “Negro” Bertone, quien se vino desde San Luis para estar presente en el evento.

Yago, Aisha, Eloy, Alma y la mamá Luisina, que ofrece canelones a quien se para a comprarlos.

Un nuevo sicólogo. Mariano Giaquinta ya está en funciones. Sus padres, Mónica Guerra y Jorge Giaquinta, orgullosos de su pollo.

Yago, Aisha, Eloy, Alma y la mamá Luisina, que ofrece canelones a quien se para a comprarlos.