Vivir sin agua
En varias zonas de Chacras existen personas que están viviendo la odisea de transcurrir estos días de altas temperaturas sin una gota de agua. O con cinco.
Una vecina del Callejón Gutiérrez relata que desde fines de noviembre del año pasado vienen reiterando los reclamos por la falta del servicio de agua potable. “Hemos sido constantes en los reclamos cada día del mes de diciembre y en lo que va de enero 2025”, cuenta.
Fueron realizados en todos los formatos posibles: al WhatsApp de Aguas Mendocinas y en forma presencial -donde la empleada que los atendió fue muy cordial, pero no pudo informarles por qué no tienen agua-, al 810 que atiende un operador pero tampoco sabe explicar por qué les falta el suministro. También denunciaron al EPAS que, aunque ha sido disuelto, el ente aún no ha sido traspasado a Irrigación.
En varias ocasiones, personal técnico ha inspeccionado los filtros y conexiones, pero el suministro sigue siendo insuficiente. “La desesperación nos fue ganando, nos sentimos “atrapados sin salida”, ahogados, pero sin agua”. Más aún cuando hay niños y personas muy mayores.
“El problema es construir más viviendas con los mismos servicios. Si no se hacen obras para mejorar, no alcanza”, dijeron.
Crece la desesperación en Chacras de Coria
Vecinos denuncian la falta de agua desde noviembre, una problemática que se intensifica con el calor. Los cortes prolongados, la falta de presión y las soluciones insuficientes brindadas por Agua y Saneamiento Mendoza (Aysam) generan profundo malestar en la comunidad.
Por Mercedes
Los afectados, principalmente en los barrios Loteo de Minetto y Valle de Chacras, y en la zona del Callejón Gutiérrez, aseguran que la situación empeoró durante el verano. “Vienen, revisan los filtros domiciliarios, pero seguimos sin agua”, expresó una mujer que hace 25 años vive en Loteo de Minetto, sobre la calle Las Verbenas. Otra vecina comentó: “Abrimos la canilla y no sale ni una gota. Estuvimos ocho días sin agua en enero”. Varias familias, ante la falta de suministro, se vieron obligadas a abandonar sus hogares, pues “sin agua, una vivienda es inhabitable”.
A pesar de los reclamos constantes, los vecinos aseguran que no han recibido respuestas definitivas. “Fuimos personalmente a Aysam, pero ni siquiera nos explican por qué ocurre esto”, relató otra residente. Aunque Aysam habilitó una cisterna que abastece parcialmente la zona, muchos consideran que esta medida es insuficiente. “Con estos calores, realmente es angustiante”, afirmaron.
Raúl, vecino de la calle Los Crisantemos, lamentó las dificultades cotidianas derivadas de la falta de agua: “No podemos usar el lavarropas ni otros elementos esenciales”. Además, cuestionó la prioridad dada a otros proyectos urbanísticos. “Es necesario priorizar a la gente antes que a nuevos barrios o proyectos vinculados a la minería. El agua es lo más importante que tenemos en Mendoza y debe ser lo que mejor cuidemos”, subrayó.
Otro vecino denunció que, a pesar de los reclamos, la respuesta de Aysam ha sido ineficaz. “Hace un mes estamos reclamando sin que se solucione nada. Vienen a ver y se van”, indicó. Algunos residentes insistieron en el crecimiento desmedido de construcciones en la zona. “El problema es construir más viviendas con los mismos servicios. Si no se hacen obras para mejorar, no alcanza”, dijeron.
La falta de soluciones efectivas ha generado decenas de reclamos formales tanto telefónicos como presenciales en las oficinas de Aysam, pero los vecinos aseguran que las respuestas siguen siendo vagas, sin un plan claro y sin un compromiso serio. En varias ocasiones, personal técnico ha inspeccionado los filtros y conexiones, pero el suministro sigue siendo insuficiente. La entrega de agua mediante cisternas ha sido la única respuesta concreta, aunque no soluciona el problema estructural, que se agrava con la mayor demanda en verano.
Desde Aysam, señalaron que están “monitoreando la zona, verificando presiones y buscando obstrucciones, especialmente en Minetto”. Sin embargo, los vecinos exigen una solución más rápida y una comunicación efectiva. “No podemos seguir viviendo en la incertidumbre. El agua es un derecho básico, no una opción”, enfatizó una de las vecinas afectadas.
La falta de agua en Chacras de Coria ha alcanzado niveles insostenibles. Con un suministro cada vez más irregular y respuestas insuficientes por parte de Aysam, los vecinos viven con creciente angustia, especialmente en pleno verano. La situación no solo afecta la calidad de vida de los habitantes, sino que también pone en evidencia la falta de planificación y recursos para enfrentar una crisis hídrica que cada vez se intensifica más. Mientras la comunidad espera soluciones definitivas, el malestar y la desesperación crecen al igual que la firmeza en el reclamo: que se les garantice el derecho elemental de acceso al agua.