Descontracturada, divertida, atípica, esta exposición al mismo tiempo fragmentaria y total se propone como un ida y vuelta con el legado vital de Cris para recordar de la forma más idónea a este artista diferente.
La idea fue recorrer en honor a Cris los lugares tres espacios elocuentes, en el entorno de los días de un artista que eligió Chacras de Coria para su habitar.
El punto de partida fue en la emblemática galería de Mendoza, Protea Espacio Cultural, en el Chacras Park, donde se lucen el cuadro Los representantes y los grandes premios del artista. La segunda parada fue el Café Pulcino, el lindísimo reducto de calle Italia, donde una selección de la obra más lúdica de Cris dejó colmado de arte el lugar. Finalmente, la peregrinación llegó a Espíritu Zorro, la destilería de gin de calle Loria, que albergó obra del artista desde que abrió sus puertas. “Es que también existe una relación entrañable y de toda la vida con esta casa”. Aquí podrá apreciarse la obra pícara de Cris, realizada en los últimos años.