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Módulos para emergencias habitacionales

Módulos para  emergencias habitacionales

Creatividad sin límites en la materia


Un proyecto innovador que trata de acercar una solución rápida en situaciones devolver la calidad de vida que ha perdido el usuario brindando las necesidades de una vivienda mínima disparador al menos del planteo de una solución

Por Aurora Fernández

Gonzalo Álvarez, más conocido por los chacrenses como “Chino”, es un muy joven arquitecto cuyo proyecto arquitectónico G.E.A.  -Global Emergencies  Architecture  o Arquitectura para Emergencias Globales-,  fue seleccionado en el Concurso Innovar, entre más de 10.000 proyectos del país en la categoría “Concepto Innovador”.

En una entrevista en su atelier, en el que junto a su novia Virginia Iannuzzi crean además exclusivas confecciones  de alta costura y prêt-à-porter,  Gonzalo cuenta a Correveidile sobre G.E.A.

En pocas palabras, ¿de qué se trata tu proyecto?

Se trata de un sistema urbano de campaña autónomo, que funciona sobre la base de un módulo que se va a acoplando con otros y permite crear habitáculos en un tiempo muy breve. Está diseñado para dar solución habitacional a comunidades afectadas por catástrofes naturales, epidemias, guerras,  etc., de forma rápida.

¿Cómo funcionan estos diferentes módulos y cómo se acoplan?

En una reducción conceptual podemos pensar en una paragüitas de bebé como un módulo que con la aplicación de una simple fuerza despliega la estructura metálica de soporte, de traslado y de contención del niño.

El diseño del módulo G.E.A. incluye un complejo sistema estructural kinemático, de ingeniería hidráulica y neumática. También de aislación, iluminación y ventilación, de circuitos de infraestructura que trasladan agua, electricidad y desechos. Básicamente consiste en una especie de capullo que contiene en sí mismo toda la estructura de soporte –que puede ser  de aluminio o cualquier otro metal liviano- y  de  aislación -una especie de gran carpa de  una combinación de telas térmicas e impermeables, de doble capa y que se infla-.

Al desplegarse, este “capullo” se transforma en habitáculos reorganizables. De ellos uno es central de programa o destino variable (comedor, estar, aula, sala de operaciones, oficina, etc.) y tres son periféricos de programa único pero de libre disposición (baño, cocina, acceso-buhardilla)

¿Cuáles son sus principales características?

En el diseño tuve en cuenta cinco conceptos básicos: es modular – para graficarlo pensemos en un panel de abejas cuyos módulos hexagonales aprovecha en forma perfecta el espacio-; es transformable, es decir que permite un traslado rápido y fácil, además de una ejecución y montaje eficiente en obra; es programable, es decir que puede adaptarse a diferentes necesidades de uso, de geografía e incluso culturales; es autosustentable, porque está pensado para adaptarse al tipo de energía que haya disponible y es de fabricación industrial, es decir que tal como un auto, puede fabricarse de forma masiva.

¿Cómo te surgió la inquietud?

Las personas afectadas por catástrofe sufren pérdidas materiales parciales o totales de sus hogares o lugares de trabajo. El aspecto radical de mi trabajo es devolver la calidad de vida que ha perdido el usuario brindando las necesidades de una vivienda mínima y de infraestructura necesarias   para seguir adelante dignamente.

En mis investigaciones llegué a la conclusión de que al menos en América Latina no hay previsión por parte de las autoridades respecto a cómo actuar en situaciones de catástrofe provocadas por inundaciones, terremotos, tornados, incendios, erupciones. No existen planes de evacuación y relocalización, de sanidad, de una vivienda que les permita recuperarse. Los damnificados en este tipo de situaciones perdieron todo y continúan perdiéndolo porque no encuentran un lugar desde el que puedan reinsertarse.

Mi proyecto actúa como disparador al menos del planteo de una solución y  es perfectamente construible y adaptable a los materiales disponibles.

Arquitectura y Moda

– ver también suplemento moda-

¿Cómo explicas tu trabajo junto a Virginia en el mundo de la moda. A simple  vista es difícil ver la relación entre moda y arquitectura?

Todo es creatividad orientada a diferentes vehículos de manifestación: la arquitectura, la moda, el diseño industrial.

¿Cómo proyectan el trabajo juntos?

Trabajamos juntos hace cinco años y proyectamos ampliar la línea de indumentaria, afianzar la marca Ikebanna y desarrollar nuevos mercados tanto en el interior como en el exterior.

¿Cómo se distribuyen las tareas? Con tanta creatividad fluyendo no debe ser fácil congeniar.

Trabajamos juntos tanto en el diseño de las prendas, que es exclusivo y a medida, en el diseño de las telas, en el desarrollo estético de las producciones fotográficas de promoción.  Virginia también asesora respecto a los accesorios, medias, gorros, zapatos, maquillaje, etc.


Concurso Innovar

Este Concurso Nacional de Innovaciones,  organizado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Innovación Productiva, busca por definición “estimular y difundir los procesos de transferencia de conocimientos y tecnología, aplicados a productos y/o procesos que mejoran la calidad de vida de la sociedad” y otorga a los ganadores de cada categoría diferentes premios en efectivo.

La categoría Concepto Innovador contempla el diseño conceptual de productos o procesos originales que, para su concreción, pueden considerar incluso tecnologías que actualmente no existen, pero que podrían desarrollarse en el futuro.

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