Categoría | Cultura

De películas: El cine no se mancha

El fútbol es protagonista de esta selección donde la pelota ocupa su lugar en la pantalla.

Por Lic. Patricio Pina*

Pasó el Mundial. La transmisión en cadena desde Rusia (casi en continuado, favorecida por las diferencias horarias y esos extravagantes días sin noche de Moscú) ya dejó lugar al zapping habitual, mientras las programaciones fueron retomadas por sus respectivos canales. Los Viudos de la Pelota caímos en una crisis de abstinencia, obsesionados por encontrar paliativos en cualquier balón que ruede por el mundo, no importa si la cancha es un lodazal o si el partido lo juegan dos ignotos e impronunciables equipos de Indonesia. Todo sirve a la hora de reencontrarnos con el intransferible (y muchas veces incomprensible) placer de disfrutar de esa pasión de multitudes que es el fútbol.

Mientras la pelota vuelve a rodar, podemos repasar cinco películas argentinas donde el fútbol es protagonista:

PELOTA DE TRAPO (1948): Retrato de la esencia popular del deporte. Guión de Borocotó, dirección de Leopoldo Torres Ríos, actuación protagónica de Armando Bo y unos cuantos cracks de la época haciendo de sí mismos. El club Sacachispas surgió a partir de este film. Más allá de los ingredientes melodramáticos, la película es un canto a las raíces barriales del fútbol.

EL HINCHA (1951): Enrique Santos Discépolo encarna a un hincha con operístico romanticismo. El club por encima de todo, al punto de dilatar hasta el infinito su casamiento con la jovencísima Diana Maggi. “Romperse los pulmones en las tribunas hinchando por un ideal”, monologa el autor de Cambalache en su último trabajo para el cine. La exaltación del amateurismo no oculta los ángulos corruptos del deporte. Y sí: en el 506 y en el 2000 también.

EL CRACK (1960): Dirigida por José Martínez Suárez, expone con rigor realista la construcción química y mercantilista de una estrella futbolística, con el ramillete de intereses oscuros que lo circundan. Ya no hay lugar para finales felices, y Argentina venía del desastre de Suecia en 1958.

LA FIESTA DE TODOS (1979): película de Sergio Renán de imposible digestión ideológica, celebra la obtención del mundial en el 78 con registro documental, mientras muchos famosos alternan situaciones ficticias como eslabones cómicos entre partido y partido. Varios subtextos tenebrosos, más unas palabras de Félix Luna ensalzando las multitudes “limpias” que festejan el título, dan vergüenza ajena. La fiesta no fue de todos. El cine no se mancha.

METEGOL (2013): La incursión de Campanella en la animación en 3D, partiendo de un cuento del gran Fontanarrosa, se mostró ambiciosa y pensada para públicos globales. Con más de un guiño excesivo a favor de la nostalgia y el pasado como patria feliz, resulta eficaz en sus logros visuales. Las voces bien argentas de nuestros actores le dieron el color local imprescindible.

*Rector de la Escuela Regional Cuyo de Cine y Video. Junto a Claudia Nazar dan el Taller de Cine “Una de machos”, en la Biblioteca Popular de Chacras de Coria, todos los sábados a las 18 hs.

Deje su comentario

Encuesta

> >
Encontrá este widget en www.argentina.ar
Failure notice from provider:
Connection Error:http_request_failed
Correveidile en Facebook

 

septiembre 2018
L M X J V S D
« ago   oct »
 12
3456789
10111213141516
17181920212223
24252627282930

Chacrificados

Edición Papel