Me desperté esta mañana, levanté los brazos, moví las rodillas, giré el cuello…, y todo hizo “crack”.
Conclusión: no estoy viejo, estoy deliciosamente crocante.
Me desperté esta mañana, levanté los brazos, moví las rodillas, giré el cuello…, y todo hizo “crack”.
Conclusión: no estoy viejo, estoy deliciosamente crocante.