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80° aniversario del ACM

Un lugar de esparcimiento en Chacras

El Automóvil Club Mendoza, una entidad señera en la provincia, con instalaciones deportivas en Besares al 1.244 de Chacras de Coria y sede social en Luzuriaga al 676 de Ciudad, acaba de cumplir sus 80 años de trayectoria lo que celebrará con una gran cena aniversario los primeros días de diciembre.

Por José Félix Suárez.

Especial para Correveidile.

La entidad fue fundada el 30 de agosto de 1931 por un grupo de amigos y vecinos que se reunían habitualmente en el local del Centro Protección Recíproca Chauffeurs y que deseaban constituir un club que se dedicara a la organización y a la promoción de las actividades mecánicas. Mediante una carta que tenía el membrete de la Comisión Pro-Constitución del Automóvil Club Mendoza se invitó a participar de esa reunión a deportistas, comerciantes y ciudadanos en general a fin de que promovieran ideas y sugerencias para la creación de una institución que trabajara para el bien y el desarrollo de la vialidad y el turismo en Mendoza.

Un respetado comerciante del medio –Andrés Pattone– asumió como primer presidente, mientras que el lugar de sesiones se fijó en el mismo espacio del Centro Protección Recíproca Chauffeurs. Posteriormente se mudó a la Av. Sarmiento 663 casi esquina 25 de Mayo; Pueyrredón al 700; Belgrano a metros de Juan B. Justo, donde ocupó un moderno edificio de tres pisos; Av. San Juan cerca de José Vicente Zapata y la actual de la calle Luzuriaga.

La organización del Gran Premio Vendimia de Automovilismo se convirtió en el desafío inicial de aquellos dirigentes, los auténticos precursores del deporte tuerca en la provincia.  Se recuerda que por iniciativa de un conocido periodista deportivo –José Fosforito Fernández-  en 1939 se disputó la primera edición del clásico Vendimia que consagró vencedor a Rodolfo Martini en un complicado circuito de 7 curvas y 7.400 metros de longitud en los campos de aviación de El Plumerillo.

Por esa época también se competía en la zona conocida como El Borbollón en Las Heras en el predio que en la actualidad ocupa el aeropuerto internacional Francisco Gabrielli y la IV Brígada Aérea. También llegó a correrse en un escenario delimitado por varias calles internas del Parque General San Martín en las inmediaciones del paseo de El Rosedal. Obviamente que la prueba nació en adhesión a los festejos vendimiales y muy pronto alcanzó notoriedad en el país. Nombres como los de Oscar Alfredo y Juan Gálvez, Félix Peduzzi Nasif Estéfano, Héctor Pirín Gradassi, Carlos Alberto Pairetti, Luis Rubén Di Palma, Eduardo Copello, Jorge Cupeiro, Guillermo Yoyo Maldonado, Juan María Traverso, Jorge Omar del Río, Jorge Cocho López, Ernesto Tito Bessone y muchos más prestigiaron con su presencia la prestigiosa competencia.

Además de los mendocinos Florentino Tino Castellani, Pedro Yarza, Pablo Gullé, Julio César Pichón Castellani. Víctor García, Hugo Gimeno, Salvador Attaguile, Guido Maineri, Emilio Boretto y Emilio Bertolini. Por otra parte pasaron las categorías más importantes como el TC y el TC 2000 y en sus inicios la Fuerza Libre Limitada. Incluso la Fórmula Uno, aunque sin puntaje para el Campeonato Mundial de Pilotos, un inolvidable domingo 5 de marzo de 1956 en el desaparecido autódromo del Parque Aborigen, donde brilló el consagrado Juan Manuel Fangio vencedor de punta a punta. Escoltado por el inglés Stirling Moss, el francés Jean Behrá, el argentino Carlos Alberto Menditeguy y el inglés Peter Collins.

Sede de Chacras

El ACM cuenta con una moderna sede deportiva en un predio que fuera inaugurado en 1966 y que ubica en la calle Besares al 1.214 de Chacras de Coria, en Luján de Cuyo. “Un espacio recreativo y de esparcimiento” como señaló el titular de la entidad, José Scordo Lara, un recordado volante del Zonal Cuyano y del Turismo Mejorado y Turismo Nacional en la década del ‘60, durante una gentil entrevista que brindó al periodista de Correveidile. Posee tres canchas de tenis, tres canchas de squash, dos gimnasios de grandes aparatos muy bien equipados, una cancha de básquetbol y una pileta climatizada de medidas olímpicas. La mayoría de estos servicios, según lo que comentó el activo dirigente, se encuentran concesionados para brindar una mejor atención a los socios y visitantes en general. Funcionan además un restaurante, 15 churrasqueras, quinchos, juegos infantiles para niños y hasta un pelotero para festejos de cumpleaños. El presidente estima que unas 200 personas concurren diariamente a sus instalaciones.

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