Archivo | septiembre 12th, 2023

La anhedonia o el vacío de no sentir placer -->

La anhedonia o el vacío de no sentir placer

“No puedes evitar que el pájaro de la tristeza vuele sobre tu cabeza, pero sí que anide en tu cabellera”

Proverbio chino

“No te estás fijando bien”, decía el personaje de David Bowie en la película “Laberinto”, “Está lleno de aperturas, sólo que no las ves”. Algo semejante ocurre con las personas que padecen anhedonia. La vida está llena de placeres, sólo que no pueden disfrutarlos.

Mirar las estrellas, leer un buen libro, charlar horas con amigos, escuchar el sonido del mar, tomar un vino o comer un postre rico, seguro son algunas de las actividades que integran una vasta lista de cosas que nos dan placer. Son esos momentos de indescriptible sensación de bienestar, que no queremos que acaben más.

Las personas que sufren de anhedonia, no pueden disfrutar de las cosas de la vida ni experimentar placer.

La palabra viene del griego “a” (falta de) y “hedoné” (placer). Fue utilizado por primera vez por el psicólogo francés T. A. Ribot, para referirse al síntoma que observaba en sus pacientes psiquiátricos.

“No entiendo”, me decía una paciente, “tengo todo lo que pude haber deseado, y, sin embargo, no lo disfruto, nada me provoca placer”.

La anhedonia no es una entidad en sí misma, sino que acompaña a alteraciones afectivas como depresión, ansiedad, síndrome de abstinencia, esquizofrenia, etc. Las personas no pueden experimentar placer. Sencillamente, no lo sienten.

Los especialistas la distinguen de la alexitimia, que se da cuando sí se sienten emociones, pero a los pacientes les cuesta reconocerlas.

¿Cuáles son los síntomas?

-          Pérdida de interés en actividades que antes sí generaban placer.

-          Cambios en el peso.

-          Alteración en el sueño.

-          Inquietud, agitación o enlentecimiento motor.

-          Sensación de pérdida de energía.

-          Dificultad para tomar decisiones.

-          Sentimientos negativos hacia uno mismo y/o los demás.

-          Aislamiento social. Dificultad para relacionarse con otros.

-          Disminución de la libido.

-          Fingir emociones que en realidad no se sienten.

Estos síntomas deben afectar la vida cotidiana de la persona y acarrear dificultades en las relaciones interpersonales en diferentes áreas: familia, trabajo, social.

La anhedonia es portavoz de una enfermedad afectiva de base, por lo cual, sus causas estarán ligadas al cuadro que acompaña. Desde las neurociencias, se sabe que existe una alteración en el sistema de recompensas del cerebro. Especialmente, la dopamina -neurotransmisor que interviene en la sensación de place- disminuye sus niveles en cuadros como la depresión, ansiedad, etc. Este descenso provoca que ya no sintamos placer al hacer las cosas que antes sí lo despertaban.

¿Cuáles son los factores considerados de riesgo?

-          Tener familiares con historia de padecimiento psiquiátrico como depresión mayor, esquizofrenia, trastornos alimentarios.

-          Historia personal propia de las enfermedades antes citadas.

-          Haber vivido un hecho estresante o traumático -maltrato, abuso-.

-          Padecer una enfermedad crónica que afecte la calidad de vida.

El tener amigos, realizar actividad física, disfrutar de pasatiempos o hobbies actúan como factor protector.

¿Cómo se trata? Desde ya, consultando con un especialista, quien deberá esclarecer cuál es la alteración subyacente y, a partir de ahí, organizar la estrategia terapéutica más adecuada. A medida que vaya cediendo el cuadro de base, mejorará la capacidad de sentir placer.

Hay pacientes que manifiestan sentir como un “chaleco”, que la aleja del placer, otros refieren no entender el disfrute de los demás. Lo cierto es que perder el “gustito a la vida” abruma, aleja, exaspera, confunde, asusta, como cuando no encontramos la salida de un laberinto. Permitirse averiguar qué está pasando y pedir ayuda son las llaves que abren la puerta a volver a sentir.

Lic. Cecilia C. Ortiz

Neuropsicóloga

Mgster. en Neurociencias


Escrito en SaludComentarios (0)

José Daniel López Laur reconocido por la Legislatura -->

José Daniel López Laur reconocido por la Legislatura

Fue el 3 de agosto pasado, en la sala colmada por su familia y amigos, cuando el profesor y médico urológo recibió el agradecimiento de los legisladores por su invalorable aporte a la salud de los mendocinos.

Otro vecino, Cato Aguilar, le escribió estas palabras, desde un fanático del Lobo a otro.

Simplemente un hermano de la vida y el tablón

El invierno, es una verdadera prueba de fuego para Chacras de Coria. El día se presenta frío, cae agua nieve y un viento leve que completa el típico día invernal.

Día ideal para tomar un café y tener una buena charla con un amigo. Y así sucede.

Me encuentro con José Daniel López Laur, un amigo muy especial, alguien con quien se puede conversar de cualquier tema y siempre resulta un acto de enriquecimiento para su interlocutor.

Comienza contándome la historia de su familia, que es su propia historia.

Recuerda que su bisabuelo, Francois, llegó desde Francia en 1889, se radicó en Cruz de Piedra, Maipú y en 1903 fundó la Fábrica de Aceite de oliva Laur, empresa que se convertiría en una de las más importantes del mundo. (N.delaR.: hoy ha sido nominada como la mejor aceitera de la Argentina)

José Daniel nació en la calle José Vicente Zapata y San Martín, frente a la Iglesia de los Jesuitas. En aquellos tiempos de menos tránsito vehicular y menos personas en la calle, los niños del barrio aprovechaban las veredas amplias y algunos baldíos para jugar “a la pelota”, generalmente a “las cabecitas con dos rebotes”, o intensos “partidos desafíos con los chicos de las calles Rioja o Salta”. Salía a jugar con pantalones cortos -eran habituales en esa época-, medias Carlitos y zapatillas Pampero con punteras de plástico o bien con las legendarias Sacachipas. Completaba con la camiseta de Gimnasia, comprada en casa Larraya o en Deportes Bermúdez. La pelota podía ser la Pulpo o bien un fútbol de cuero Sportlandia con tiento. Siempre ha sido un buen jugador -todavía lo practica-, se probó en Gimnasia con éxito, pero lo dejó: el estudio le ganó al deporte. El Colegio de Los Hermanos Maristas lo había preparado en forma inmejorable para su ingreso a la Facultad de Medicina.

También durante su infancia le encantaba ir domingo por medio a visitar a sus abuelos maternos en Cruz de Piedra.

Obtuvo el título de Médico en 1974 e inmediatamente se fue a perfeccionar a Madrid en Urología. Luego su casamiento con Matilde, sus frutos más grandes, sus hijos: Constanza, Rodrigo, Gastón y Marcela, grandes profesionales pero sobre todo personas de bien y con ellos llegaron sus nietos. Su mayor alegría es recibir cada domingo a toda la familia, casi todos vistiendo las camisetas blanquinegras. Es que les inculcó su amor por el Lobo mendocino de la misma manera que su padre primero y luego su primo Coco Herrera -recordado hincha y ex dirigente- se lo inculcaron a él.

Ha recibido innumerables premios y reconocimientos en el orden provincial, nacional e internacional, pero le causa una emoción especial el que recibió el pasado jueves 3 de agosto, cuando la Legislatura de Mendoza lo reconoció por su aporte a la salud del pueblo mendocino.

Ahí estuvieron su familia, amigos e integrantes de la gran familia blanquinegra.

Nos despedimos con un gran abrazo de Lobo y mi profunda admiración.

Eduardo Cato Aguilar


Escrito en VecinalesComentarios (0)

Familias pioneras -->

Familias pioneras

Los Bauco, la cultura del trabajo y un callejón que los homenajea

Los Bauco llegaron a nuestro país, como muchos por aquellos años en que se construía la Patria, desde “la Italia”. Proveniente de la provincia de Aquila “Comune Di Civita  D’Antino, fue en el año 1901 cuando Rafael se radicó en nuestros pagos. Aquí se dedicó, como la mayoría de sus pares, a la agricultura. Luego fue la vitivinicultura, más tarde la instalación de talleres de maquinaria agrícola y luego de transporte de pasajeros. La pequeña empresa nacida de tanto esfuerzo era administrada por su dueño, quien contaba con la colaboración solidaria de su cuñado Juan Olivano, su concuñado Armando Caponi y sus primos hermanos Luis y Lorenzo Bauco, este último más conocido como Minoto.

Numerosos emprendimientos comerciales llegaron a nuestro pueblo de la mano de esta familia que recaló en nuestros pagos cuando el siglo XX nacía.

1- El Hotel San Francisco

Fue gestado en la década del cuarenta. Por esa época la familia Bauco tenía la “Residencial Pueyrredón”, el primer hotel de Chacras de Coria, en donde con el tiempo, se hospedaron numerosas personalidades. Por ejemplo, escribe Nicolás Sosa Bacarelli en aquella nota sobre la familia Bauco en Correveidile del año 2014, “una vez llegó un joven estudiante de Derecho, con su familia. Traía un niño enfermo de asma y le habían recomendado el aire de aquí y las atenciones de los dueños de casa. “El chico sostenía con una mano el libro –estaba estudiando las últimas materias- y con la otra, su hijo”, cuenta Marcelina. El joven estudiante era el doctor Raúl Alfonsín y luego llegaría a ser presidente de la Nación”.

En un momento la casa les quedó chica para albergar tantos turistas, fue entonces que Francisco y sus seis hijos decidieron comprar una quinta, propiedad de la familia Fernández, ubicada más arriba de la misma calle Pueyrredón, para construir el Hotel. La familia Bauco se dedicaba a fabricar ladrillos, por lo tanto todo el edificio fue construido con ladrillos que llevan el sello Bauco. Finalmente el Hotel fue inaugurado en 1954.

La quinta rebozaba de árboles frutales, parrales y pinos, por lo que el arquitecto Fanhoe diseñó el edificio tratando de salvar la mayor cantidad de especies, lo que permitió que hoy se pueda disfrutar el añoso parque que rodea el Hotel.

EPIGRAFE

Fachada del viejo Hotel San Francisco, en sus primeras épocas de gloria.

La Cena Inauguración del Hotel San Francisco

Corría el año 1954 y el Hotel San Francisco abría sus puertas al público. Sentados entre los comensales vemos a recordados vecinos de nuestro pueblo, como el querido doctor Carlos Levy, “el médico gaucho”.

2- Primera línea de ómnibus Chacras-Mendoza

“Los vecinos aún recuerdan otro interesante emprendimiento de la familia Bauco, que logró cambiar el ritmo del pueblo y “acercarlo” un poquito más a la Ciudad. Considerando lo difícil que resultaba para muchos llegar al centro mendocino, don Francisco adquirió cuatro colectivos y con ellos fundó a principios de los años 40, lo que podríamos llamar la primera empresa de transporte de pasajeros dedicada al trayecto Chacras-Centro, Centro-Chacras. Los ómnibus partían de la casa familiar y lo hacían con la frecuencia justa para acompañar el ritmo de vida de aquel tiempo”, sigue contando Sosa Bacarelli.

La empresa de ómnibus Paso de los Andes, primera línea de pasajeros que conectaba Luján  con la ciudad de Mendoza.

1- El tren turístico de Luján y el balneario Cipolletti

Con dos vagones tirados por un tractor, esta especie de tren turístico nacido del ingenio de Rafael Bauco, formaba parte de una “escudería” compuesta de tres unidades. Fue una de las primeras líneas de transporte público de nuestro departamento.

El recorrido comenzaba en la plaza de Luján, frente a la Iglesia y, por Sáenz Peña hacia el oeste, se dirigía por calle Chile hasta el dique Cipolletti.

Y es que allí se encontraba “el balneario de moda” de la época, a orillas del Río Mendoza: contaba con una hostería, pileta de natación, un inmenso parque de frondosos árboles y un lago artificial, hábitat de plantas acuáticas y peces multicolores.

“Otro de los atractivos era la presencia de un fotógrafo, creo que se llamaba Alfonso Segovia, que posibilitaba que los visitantes se llevaran un recuerdo del paseo”, cuenta Roque Bauco, nieto y tocayo de aquel pionero, quien se desempeñó como concejal por el Partido Demócrata en la década del ’60 y que gentilmente nos cediera la foto.


Escrito en Historias de ChacrasComentarios (0)

Sorteo solidario -->

Sorteo solidario

Artistas mendocinos han organizado el sorteo de una escultura cerámica, obra de Esteban Boasso, para recaudar fondos para el tratamiento oncológico de la artista Marta Icarte, a realizarse en Chile.

El día del sorteo es el 16 de setiembre

Quienes estén interesados en colaborar: 261 557 6837


Escrito en Comentarios al margenComentarios (0)