Categoría | Salud

¿ Qué es el Gaslighting?

Existe un tipo de maltrato sutil, pero no por ello innocuo. Te contamos de qué se trata

“Se lo digo porque quiero que le guste la historia de verdad,

y si le doy lo que usted quiere, no le gustará y ya no me querrá más”

(de la película Misery)

Alguna vez te han dicho repetidas veces frases como: “No quiero que pienses que te estoy manejando/manipulando”, “¿Cómo pensás que voy a ser tan mala persona para manejarte?”, “Vos tendrías que saber lo que a mí me gusta/lo que yo quiero/lo que yo pienso/lo que espero de vos”, “Yo te amo, no te digo esto para hacerte daño”.

Gaslighting es un tipo de maltrato sutil, una manipulación psicológica, sistemática y repetida, que busca que la otra persona llegue a dudar sobre su propia capacidad para percibir la realidad.

La finalidad es anular el propio criterio del otro para poder manejarlo más fácilmente. En casos extremos, la persona hasta llega a dudar de su propia salud mental, delegando toda la capacidad de decisión en el otro. La estrategia comunicacional primordial que se utiliza es la DESCALIFICACIÓN: se busca negar la realidad del otro a través de distorsionar sus percepciones, agregar información para confundir, minimizar, contradecir o exagerar datos.

Los efectos del gaslighting son:

  1. Dudas sobre la propia memoria: Se busca inducir al otro a DUDAR sobre sus propios recuerdos: “eso nunca pasó”, “Yo nunca dije/hice eso, te estás confundiendo”, “Debés haber escuchado/visto mal, eso no pudo pasar”.
  2. Dudas sobre la propia inteligencia: Se busca que la otra persona adopte un rol sumiso, para esto, se marcan los errores del otro sobredimensionándolos, con lo cual, la persona que sufre gaslighting comienza a tener PÁNICO de cometer errores: “No puedo creer que hayas hecho/dicho eso”, “¿Cómo no te diste cuenta/no pensaste?”, “¿Vos sos o te hacés?, “Ahhh! Pero que bruto/a sos”, “Vos estudiaste tanto para esto?”, etc.
  3. Dudas sobre la propia salud mental: Se induce al otro a pensar que tiene problemas psicológicos o psiquiátricos: “Vos estás loco/a”, “Sos un/a demente”, “Tendrías que hacerte ver/hacer tratamiento”, “Sos muy sensible, te estás haciendo la película otra vez”, “siempre buscás problemas y si no, los inventás, vos boicoteás la relación”.
  4. Dudas sobre la propia capacidad para tomar decisiones: Conduce al otro a pensar que no tiene criterio ni juicio crítico suficiente para tomar decisiones adecuadas, con lo cual, obviamente, éste termina delegando la acción: “Siempre decidís mal”, “No sabés tomar buenas decisiones”, “Cada vez que decidís algo, lo hacés mal”, etc.

Si pensás que sos víctima de gaslighting, lo primero que tenés que reconocer es que es una RELACIÓN ABUSIVA y que hay responsables. Tu responsabilidad consiste en no quedarte en la relación y, así, hacerte daño. Entonces:

-          Reconocé las señales. El gaslighting no se da de la noche a la mañana, es un patrón de relación duradero y sutil. Uno puede adaptarse a esos tratos, lo que no quiere decir que sean naturales.

-          No sientas vergüenza.

-          Escuchá a tu instinto. Si sentís que en tu relación algo no está bien, consultá.

-          Confiá en vos. Que te desacrediten y te rebajen NO ES UNA MANIFESTACIÓN DE AMOR.

-          Buscá apoyo en amigos, familiares y, si hace falta, ayuda psicológica. El primer paso es protegerte, luego, tomar las medidas necesarias.

Es necesario que trabajes sobre tus aspectos que te han llevado a quedarte en una relación dañina para no repetir la historia.

Mgster. Cecilia Ortiz

Neuropsicóloga


Deje su comentario