A 51 años de su histórico combate contra Muhammad Alí en el Madison Square Garden de Nueva York recordamos su anecdótico paso por Mendoza.
Por José Félix Suárez - Especial para Correveidile
A mediados del reciente mes de noviembre concluyó el rodaje de la serie televisiva “Ringo, el campeón del pueblo”. El guión pertenece al periodista deportivo Ezequiel Fernández Moores inspirado en la vida, trayectoria, esplendor y ocaso de Oscar Natalio Bonavena, el mediático e histriónico boxeador argentino de la categoría pesado que desarrolló gran parte de su carrera en los Estados Unidos.
El octavo y último capítulo, de 45 minutos de duración cada uno, se grabó durante una semana en nuestra provincia a cargo de la productora Pampa Films. La locación elegida fue la localidad cordillerana de Uspallata por su similitud con Reno, Nevada, en el país del Norte, donde Bonavena fue cobardemente asesinado la mañana del 22 de mayo de 1976 víctima de una confusa relación amorosa con Sally Conforte la mujer del propietario del Mustang Ranch donde se le había prohibido la entrada. Bonavena tenía entonces apenas 33 años -había nacido en Buenos Aires el 25 de septiembre de 1942- y había quedado en la historia del boxeo mundial por su combate del 7 de diciembre de 1970 en el Madison Square Garden de Nueva York cuando enfrentó de igual a igual a Muhammad Alí (Cassius Clay), considerado el mejor pugilista de todos los tiempos, que solo pudo derrotarlo por KO en el 15 y último round.
De origen muy humilde -fue el octavo hijo de los nueve del matrimonio de Vicente Bonavena y Dominga Grillo- se hizo famoso por su carisma, simpatía, espíritu desafiante, provocador y enorme valentía. Compartió siempre su pasión por el boxeo con el fútbol y su amor por Huracán de Parque Patricios donde uno de sus hermanos, Vicente, llegó a ocupar el cargo de presidente. También actuó en teatro, televisión, participó en tres películas –Los chantas, Pasión dominguera y Muchachos impacientes - y como cantante alcanzó un éxito resonante a fines de los 60 con su tema “Pío, Pío, Pá” que interpretaba con su voz débil y aflautada.
Tenía alma de niño en un cuerpo grande, tan amiguero como sincero, peleador callejero cuando se hizo boxeador, se bautizó Ringo a si mismo porque admiraba a Ringo Star, el baterista de Los Beatles. También se hizo muy popular por los ravioles que su mamá doña Dominga le cocinaba todos los domingos. Tenía además pie plano, lo que hacía mucho más dificultosos sus movimientos sobre el ring.
Estreno en 2022
Según se informó oficialmente el estreno está previsto para el primer semestre de 2022 en fecha a confirmar. También se señaló que se podrá ver en la plataforma de streaming por Star (ex – Fox Channel) y Disney. Pampa Film es una productora que se especializa en avisos, documentales y largometrajes de distintos géneros con más de 15 películas desde sus inicios en 2006. Entre las más conocidas se encuentra “Un cuento chino” con el rol protagónico de Ricardo Darín. En la serie de Ringo los papeles principales están a cargo de Jerónimo Giacondo Bosia, Dora Raffa, María Onetto y Pablo Rago bajo la dirección de Nicolás Pérez Veiga.
“Pío, Pío, Pá”
Se recuerdan solo dos presencias de Bonavena en Mendoza. La primera el 12 de enero de 1966 cuando en el estadio Pascual Pérez de la Av. Mitre derrotó por KO en el cuarto asalto a Roberto Veliz, la única vez que combatió en nuestra provincia. En ese sentido su récord como profesional fue de 68 peleas, 58 ganadas (44 por KO), nueve derrotas y una igualdad. La segunda visita, que resultó la más entretenida y original, se produjo de manera imprevista, sin aviso previo, casi a fines de 1968 cuando llegó recorriendo la ruta del Gran Premio de Turismo de Carretera, competencia en la que finalmente no participó. En esa oportunidad paró a cargar nafta en la estación de servicio del Automóvil Club Argentino en la esquina de Av. San Martín y Amigorena. Fue tal el revuelo que causó que la policía debió cortar el tránsito con Ringo interpretando su pegadizo “Pio, Pío, Pá” a pedido de la gente que coreó largamente su nombre y lo despidió con aplausos. Bonavena se convirtió en un mito, una calle de Buenos Aires y una tribuna del club Huracán llevan su nombre, y en la cancha del Globo se escucha siempre los domingos de fútbol: “Somos del barrio, del barrio de la Quema…Somos los hinchas, de Ringo Bonavena”.
Fui testigo del revuelo que produjo su presencia casi a fines de 1968 cuando apareció de manera imprevista en la estación de servicio del ACA en Av. San Martín y Amigorena. Se tuvo que cortar el tránsito y terminó cantando su pegadizo “Pío, Pío, Pá” que había puesto de moda como cantante. Un personaje increíble. Ahora ya tiene su propia serie, que se verá el año que viene.