El acuerdo firmado entre vecinos de Chacras y la Dirección Provincial de Vialidad por el cual se resguarda la identidad de esta antigua calle de nuestro pueblo, puesta en riesgo con el proyecto original de las obras de refuncionalización de la Panamericana, viene a corroborar lo beneficiosa que resulta la articulación de una participación vecinal comprometida con organismos dirigentes empáticos. El medio ambiente agradecido.
Por Adriana Sayavedra
El conflicto se originó cuando la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) presentó su proyecto de mejora de la Ruta Provincial 82, en el sector que retoma las obras al finalizar el Corredor del Oeste -Tramo I-, hasta la rotonda Gobernador Ortíz. Son ocho kilómetros, de los cuales dos, corren en paralelo a la calle Benito de San Martín a la altura de la perpendicular calle Besares. El proyecto presentado y ya licitado, originó el inmediato reclamo de los vecinos, primero los frentistas y luego un gran número de habitantes de este bendito suelo, quienes rápidamente se organizaron y se pusieron en acción.
Y no era para menos, ya que las obras próximas a comenzar, planeaban erradicar un cerro donde vive una gran cantidad de los forestales en los laterales de calle Benito de San Martín -o La Falda, como la llaman los antiguos pobladores-, sino que también la convertían en colectora de la Panamericana para ingresar o salir a ésta. La frutilla de la torta era un muro diseñado para contener la diferencia de nivel de ambas vías. Gran impacto negativo para los frentistas en forma directa y para la calidad de vida de los chacrenses en general.
Fue así que comenzaron reuniones, idas y venidas con notas presentadas en los organismos implicados, denuncias a la Fiscalía de Estado y al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el ente que financia las obras de remodelación de la Ruta 82. Y fue gracias a esta estrategia que la movida vecinal tuvo éxito: ya que rápidamente el organismo internacional solicitó una revisión del proyecto licitado hasta tanto no se escuchara a los vecinos y se encontrara una solución al conflicto ambiental planteado.
Luego de un par de reuniones entre representantes del BID, la DPV y un grupo de vecinos que representaban el sentir de la comunidad, finalmente se logró un acuerdo satisfactorio, firmado el 26 de julio pasado, por el cual se modifica el proyecto originalmente licitado. “La alternativa existía y la solución es simple -y probablemente más económica-“, sostiene Jorge Farmache, uno de los vecinos involucrados, y explica: “Bastó con buena voluntad e imaginación: trasladar el eje de la Ruta 20 metros al Oeste para preservar indemne un pequeño bosque que representa un patrimonio histórico, natural y cultural, especialmente protegido por las leyes 7873, 7874, 7875 y 4609 que obligan a la defensa, preservación, conservación, reforestación y recuperación del Arbolado Público”. En todos los participantes, especialmente los vecinos, llamó la atención la ausencia de la institución municipal.
Tal cual explica el ingeniero Daniel Cebrero, el supervisor técnico de la obra de la DPV, en el texto del Acuerdo: “Este desplazamiento de la obra 20 m. hacia el Oeste de la Panamericana -en vez de realizarla hacia el Este de ésta, donde se encuentra el bosque en cuestión- descarta Ia necesidad de tener injerencia alguna sobre calle José Benito de San Martin, tal como solicitaban los vecinos, salvo la mínima y necesaria para Ia prolongación hacia el Oeste de calle Besares. Este desplazamiento del eje de Ia Ruta hacia el Oeste permitirá que esta calle, de dos sentidos de circulación, admita giros a su nivel sin Ia necesidad de tránsito sobre calles colectoras” (como figuraban en el proyecto rechazado).
Descripción técnica
“El traslado de las ramas y ruta principal hacia el Oeste, a diferencia del Proyecto Licitado, permite preservar casi Ia totalidad de los árboles que se ubican en el borde oeste de Calle Benito de San Martin. Solo se interviene sabre los pocos forestales que permitirán Ia prolongación de calle Besares al Oeste, con Ia que desde el punto de vista ambiental y social se elimina un fuerte impacto que se generaba con el Proyecto Licitado”, sostiene Cebrero en el Acuerdo rubricado.
Dicha prolongación de Besares hacia el Oeste de la Panamericana será a través de un puente que viene a eliminar la construcción de la colectora “porque ya no es necesaria en Ia medida que también se desplazan hacia el Oeste las ramas de entrada y salida de Ia Ruta (lateral Este), las que ya no tendrán su inicio y fin desde Benito de San Martin sino 20 metros al Oeste”. Este cambio elimina también la construcción del muro de altura proyectado en el costado Oeste de Benito de San Martín, en el mismísimo lugar donde hoy vive esa gran cantidad de añosos forestales, que hoy respiran aliviados.
A su vez, para ingresar o salir a la Panamericana desde calle Besares se construirá un carril adicional, en Ia zona del puente, “que permitirá Ia espera de vehículos que giren a Ia izquierda en sector de dársena que evitará interrumpir Ia circulación de vehículos pasantes, de forma de disminuir los impactos por concentración y obstrucciones de tránsito, disminuyendo Ias posibilidades de accidentes”.
El documento explica que “con esta propuesta se logra: conservar sustancialmente el paisaje existente, eliminar el uso como Colectora de calle José Benito de San Martin, conservar el talud existente y no modificar el ancho de Calle Besares”.
Como obras complementarias en el intercambiador, se continuan las ciclovías y veredas peatonales que ya han sido construidas en el Tramo I de esta obra, el que se originó en la intersección con Ugarte hasta los Caracoles.
Yo lo hice
Guillermo Hernández – Vecino participante
“Luego de dos reuniones virtuales se logró un acuerdo, claramente instado por el BID –ya que ni el Municipio ni la Fiscalía de Estado se hicieron eco del reclamo vecinal-, que permitió corregir la traza original del proyecto y que quedó plasmado en un texto aprobado y acordado con los vecinos y con la DPV, siendo ello un triunfo de los vecinos frentistas y de la comunidad toda de Chacras de Coria.
Es necesario el involucramiento de los vecinos en la resolución de sus problemas y conflictos y si bien es extremadamente difícil lograr la atención del Estado en general y del Municipio en particular, ello no es de imposible resolución, aun cuando todavía ciertos resortes de los organismos públicos no se encuentran a la altura de los tiempos y circunstancias”.
Jorge Farmache – Vecino participante
“Logramos salvar cientos de añosos y bellísimos forestales y preservar la fisonomía de José Benito de San Martín, un ícono de lo que Chacras de Coria debe seguir siendo: un hermoso paisaje en una callecita cuyo nombre rinde homenaje a uno de los prohombres mendocinos, quien con su extraordinaria visión como paisajista -”el hacedor de paisajes humanos” lo pintan Adriana Micale y Jaime Correas- nos supo legar una inmensa fortuna, material y espiritual, que si bien aquí logramos preservar, en muchos otros lugares de Chacras de Coria se está innecesariamente dilapidando.
Lo que no resulta tan feliz es reconocer que para arribar a esa solución tuvo que mediar un organismo extranjero como es el BID, y lo verdaderamente asombroso: la Municipalidad de Luján estuvo ostensiblemente ausente”.
María Luz Bustos – “Arquitectas Mendoza”
“Desde el grupo ¨Arquitectas Mendoza” estamos agradecidas de haber contribuido como nexo entre los vecinos de Chacras de Coria, la Dirección Provincial de Vialidad y el BID en el Proyecto de Modernización de la Ruta Provincial 82. El diálogo entre las distintas partes interesadas resultó en una solución superadora para la realización de la traza vial, la preservación del medio ambiente, y la tranquilidad de los vecinos”.
Eugenia Videla – Vecina participante
“Se trató de un eficaz accionar comunitario en apoyo a los frentistas de calle Besares, con un objetivo común en cuanto a los aspectos paisajísticos y ambientales más allá de los intereses individuales. Hubo poco involucramiento de los entes locales hasta la intervención del BID que, con su rápida respuesta, no sólo en la recepción del reclamo de los vecinos, sino en su predisposición para mediar una solución técnica mejorada por parte de DPV, a través del ingeniero Cebrero”.
Foto: Valeria Méndez