Dos opciones saladas y una para el momento dulce. Frescas y ricas, se pueden hacer de la mañana a la noche o de un día para el otro. ¡Felicidades! **Sus Cursos de Cocina -en su casa de Vistalba o por Zoom-, son una maravilla. Más info, datos y recetas: 261 361-9120**.
Causa Limeña
Hervir 1 kg. de papas con su piel hasta que estén tiernas. Las pelamos y hacemos un puré (importante que estén todavía calientes). Agregar sal y de 3 a 4 cucharadas de aceite (me gusta que sea de oliva extra virgen). Cuando podamos meter manos sin quemarnos, amasar el puré suavemente, hasta que quede lo más “liso” posible. Añadir el jugo de 2 limones y seguir amasando. Luego, incorporar medio pimiento amarillo procesado (si no conseguimos, no ponemos nada). Dejar descansar en la heladera un rato.
Para armar la Causa: dividir el puré en dos partes. Poner la primera en una fuente con bordes altos (y que después pueda ir a la mesa, más o menos presentable). Rellenar con rodajas de palta, tomate y huevo duro. Mezclar pollo cocido y desmenuzado con unas cucharadas de mayonesa (también puede ser atún o camarones o lo que imaginemos que pueda andar bien) y sumarlo al relleno. Cubrir con la otra mitad del puré y llevar a la heladera hasta servir. Se puede hacer en la mañana y compartirlo a la noche.
Vitel Toné
En este caso serán dos supremas y no peceto. A las supremas las podemos hervir en un muy buen caldo de pollo o envolverlas para cocinar en papel aluminio, sazonadas con sal, pimienta, jugo de limón, aceite de oliva, pimentón y hierbas a gusto. Llevar al horno pre calentado a 190* por 40 minutos. Reservar mientras hacemos la salsa. En la minipimer, licuadora o procesadora poner: 1 lata de atún, 2 cucharadas de alcaparras (si no conseguimos usar 6 aceitunas verdes sin carozo), 2 filetes de anchoas, jugo de 1 limón, 200 cc. de crema de leche (yo la hice con yogurt natural, sin sabor y quedó buenísima), 2 cucharadas de mayonesa y un poquito de perejil. Procesar hasta que quede bien suave y homogénea. Para servir, cortar las supremas en rodajas finitas y salsear con la mezcla. Llevar a la mesa en una linda fuente, bandeja o plato.
A la hora del dulzor, un Zuccotto (una torta helada, bah!…)
Ingredientes:
200 gr. de vainillas
80 ml. de vino dulce tardío o almíbar de naranjas -si no queremos alcohol-
400 ml. de crema de leche
75 gr. de cacao amargo en polvo
2 cucharadas de azúcar impalpable
100 gr. de chocolate en barra picado o chips de chocolate negro
10 almendras peladas, tostadas y picadas (yo le pongo maníes y me encanta)
Lo ideal es prepararlo en un bowl o molde semi esférico, para que quede como el tradicional; pero también se puede hacer en alguna fuente. En cualquier caso, debe ser un recipiente que pueda ir al freezer. Forrar con algunas vainillas y rociar con un poco de vino o almíbar. Batir la crema hasta que quede firme y dividirla en 2 partes iguales. A una incorporarle el cacao en polvo y el azúcar impalpable y ponerla en la fuente sobre las vainillas. Añadirle a esta crema el cacao, más vainillas y rocío de vino o almíbar.
Mezclar la segunda parte de la crema con los trocitos de chocolate y las almendras o maníes y colocarla sobre este “entrepiso” de vainillas. Terminar de cubrir con el resto de las vainillas y rociarlas con el líquido que quedó.
Envolvemos la fuente o el bowl con papel film y llevamos nuestra torta al freezer por lo menos 4 horas. Mejor si es de un día para el otro. Para servirla, desmoldamos sobre una fuente o plato grande. También se pueden reemplazar las mezclas de cremas por cuartos de 2 helados a gusto.
¡Salud! ¡Cariños!