El ingeniero Alfredo Esteves* aporta sus recomendaciones para pasar la temporada de frío sin derrochar energía en el interior del hogar.
1- La temperatura interior resulta de un equilibrio entre las ganancias de calor y las pérdidas de energía. Cuando las pérdidas aumentan y las ganancias son pocas, la temperatura es mas baja. Por lo tanto, las opciones que tenemos son: abrigarnos pero mantenernos cómodos (nos sentiremos confortables a menor temperatura) y trabajar sobre el edificio para reducir las pérdidas de calor.
2- Las pérdidas de calor en calefacción resultan en un 40 o 50% por infiltración de aire. Estas se producen en las rendijas que quedan entre marco y puertas, marcos y ventanas. Por lo tanto colocar burletes autoadhesivos del tipo de espuma sintética (los más económicos duran uno o dos años), de goma o epdm (duran hasta 10 años) son elementos muy apropiados para mejorar las infiltraciones de aire. La forma de colocarlos aparece en internet.
3- Las pérdidas por las ventanas ocurren a través del vidriado y a través del marco de las mismas. Una manera económica de reducir las pérdidas por el vidriado, es colocar una cortina interior de paño pesado que cubra totalmente marco y vidrio durante las horas nocturnas. Aún cuando por salubridad quisiéramos tener abierta un poco la ventana, la cortina debería estar cerrada para evitar pérdidas de calor adicionales.
4- Colocar persianas de totora por el exterior es una buena práctica porque al cerrarla de noche previene un menor enfriamiento de las ventanas. Esta medida también servirá en verano -durante el día- para evitar la ganancia de calor en la época cálida y mantener la casa más fresca.
5- La ganancia de calor se debe dar por las ventanas, es decir, las ventanas que miran al Norte ganan calor durante todo el día. Las que miran al Este durante la mañana, y las que miran al Oeste durante las tardes. En esas horas deben permitir que ingrese la radiación solar al interior del local.
6- Cuando tenemos una galería se puede prevenir el enfriamiento de la vivienda colocando una cortina enrollable de PVC. Puede ser de polietileno, aunque tiene muy poca duración a los rayos solares. El PVC transparente permite transformar la galería en un invernadero (si es que mira al N, E u O), y su temperatura es intermedia entre el interior y el exterior durante las noches, evitando pérdidas excesivas en locales que están contiguos a ella.
7- Otras soluciones implican un gasto mayor, aunque generan un ahorro también mayor, estas son: colocar aislaciones térmicas en muros, aislaciones térmicas en techos, colocar doble vidrio (DVH) en ventanas, colocar persianas operables en ventanas, colocar sistemas solares pasivos en la envolvente del edificio para permitir ganancia de calor solar con baja inversión y finalmente incorporar sistemas solares activos (como calefones solares para ayudar a la calefacción central) pero por el costo de éstos debería realizarse un estudio para conocer bien los alcances y la efectividad de tal solución. Hay un libro: “Arquitectura Bioclimática y Sustentable” que permite conocer los pormenores y prácticas de incorporar todos estos sistemas pasivos. Para adquirirlo comunicarse con el autor: Alfredo.esteves@um.edu.ar.
8- Otra solución sería cambiar los sistemas de calefacción hacia otros combustibles más económicos. Hasta hace poco el gas natural era lo mas económico. Hoy se debe hacer un estudio si conviene más el gas natural, la electricidad o los combustibles sólidos (que muchas veces pueden provenir de la poda anual, lo que no implica un gasto adicional).
9- En el caso del agua caliente sanitaria, se puede incorporar un calefón solar. Este es muy redituable ya que durante todo el año consume agua caliente y el calefón solar permite cubrir hasta un 80-90% el consumo en este rubro.
10- En el caso de cocción, se puede utilizar cajas térmicas u hornos solares. Solicitar datos al autor.
*Investigador CONICET / Prof. Universidad de Mendoza – Fac. de Arquitectura; e-mail: alfredo.esteves@um.edu.ar