La revista infantil argentina, declarada de interés por la Cámara de Diputados de la Nación, es la más antigua del mundo. El libro “100 grandes mujeres latinoamericanas” fue presentado recientemente como parte de su nueva era.
Por José Félix Suárez – Especial para Correveidile
Creada por el fundador de Editorial Atlántida, Constancio Cecilio Vigil (1876-1954), un 17 de noviembre de 1919, la revista Billiken celebra 100 años de vida. Vigil fue también inspirador de otras exitosas publicaciones como El Gráfico (1919), que cerró en 2018 sin llegar a cumplir su esperado centenario o y Para Ti (1922), que continúa saliendo. Había editado 15 años antes Pulgarcito, dirigida a la niñez, aunque Billiken es considerada la primera revista infantil de habla hispana de la historia en toda Sudamérica. Su hijo Carlos fue quien con el tiempo impulsó el contenido escolar de la revista, con la publicación de material educativo gráfico y láminas centrales, impresas a todo color. Llegó a editar 139.500 ejemplares semanales en 1939 y 415.000 en 1945, superando el medio millón en 1958.
“Los locos años 20”, aquellos de la década del 20, además del crecimiento de Billiken trajeron la presencia del travieso Gato Félix, del genial Charles Chaplin, del boxeador Jack Dempsey, Rin Tin Tin, del marinero Popeye y su infaltable espinaca, las desopilantes aventuras de El Gordo (Oliver Hardy) y El Flaco (Stan Laurel), Tintin (comic), Mickey y otros.
Plena de ternura, capaz de arrancar una sonrisa, con su cuota de alegría y diversión, la revista se hizo famosa durante años por las ingeniosas tapas que ilustraba el gran dibujante Lino Palacio. Entre cuentos e historietas, por sus páginas pasaron personajes queribles e inolvidables como La Hormiguita Viajera, Misia Pepa, El Mono Relojero (los tres creados por Constancio Vigil), Ocalito y Tumbita, Pelopincho y Cachirula, Batuque, Pi Pío, Formulín, La Familia Conejin, Jopito y el Viejo, La Pequeña Lulú, Dany y Pompón, Manucho y su perro Calderita y muchos más. Que así como llegaban al corazón de los más chicos, también atraían a los más grandes. El disfraz de carnaval, el álbum de figuritas, el rompecabezas, los lápices de colores, los regalos sorpresa y más, mucho más.
Sin olvidar que la centenaria revista acompañó el crecimiento de varias generaciones de argentinos con su aporte cultural e intelectual. Las fechas patrias, próceres como el General José de San Martín, el Cruce de Los Andes, Manuel Belgrano, Domingo Faustino Sarmiento, el Día del Maestro, el Cabildo, la Plaza de Mayo, dieron siempre lugar a ediciones especiales.
Muchas veces para guardar y coleccionar, para llevar a la escuela y compartir en el aula con otros compañeros. A fines de noviembre del año pasado Billiken fue homenajeada por la Cámara de Diputados que, con motivo de su centenario, la declaró de interés cultural. La revista de chicos y grandes, de la niñez y la infancia, de la sonrisa, la diversión y la alegría plena.