Tras el encuentro abierto a la comunidad que tuvo lugar a principios de mayo, un grupo de vecinos, arquitectos y responsables del proyecto avanzaron hacia un acuerdo que modificó las obras tal cual estaban previstas. Una vez más, el compromiso vecinal queda a la vista y da sus frutos.

Por Andrea Calderón
Desde el pasado lunes 9 de mayo, luego de algunas idas y vueltas y de la fuerte inquietud que manifestaron los vecinos, comenzaron finalmente las obras de remodelación y puesta en valor del templo de la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, frente a la Plaza de Chacras. Convencidos de que involucrarse con este bien patrimonial era un compromiso impostergable, un grupo de chacrenses, muchos de ellos arquitectos, asistieron a una reunión convocada por los responsables del proyecto para dar a conocer el curso de las obras, que fue modificado en algunos puntos para que no se viera alterada su fisonomía, principal preocupación de los vecinos previo al acuerdo.
Así es como el edificio permanecerá cerrado hasta que finalicen los trabajos, cuyo plazo está previsto para agosto. Tras una semana de pruebas en el interior del lugar para reconocer el sistema constructivo en relación al suelo, se evalúa por estos días la estructura, para avanzar con el proyecto. Para tal fin se agujerearon cimientos de piedra, se detectó el hormigón presente en las columnas y se descubrió la profundidad de las capas del piso. “Entre lo que se ve y los datos que se actualizan en esta primera etapa, sumada a la inspección municipal, se decidirá lo que se aplica como estructura. Todo teniendo en cuenta las precauciones correspondientes de análisis, estudio y apuntalamiento”, dijo a Correveidile el arquitecto a cargo Fernando Raganato.
“Luego se continuará con lo previsto en el proyecto, es decir, el trabajo por sectores. En el interior, la parte de arcos y de columnas con sus fundaciones junto al equipo de trabajadores de la empresa constructora a cargo. Posteriormente, en el exterior, se procederá a trabajar en el patio, pendientes y pisos para cumplir con el plazo previsto, como máximo el mes de agosto”, agregó. “Como no existía documentación, era necesario ver, por ejemplo, el estado, peso y estabilidad de los muros. La idea es mantener cierto tamaño de volumen de columnas, así como el tipo de arcos y las características de lo que es el edificio en sí para mantenerlo lo más fiel posible a la realidad y tocar lo menos posible”.

Reunión consensuada y datos de las obras
En lo que resultó ser una reunión amable e informativa, la jornada del 5 de mayo en la Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro dejó a los presentes con un claro panorama de las obras que se llevarán adelante en la iglesia ubicada frente a la plaza de Chacras de Coria.
Participó el arquitecto a cargo del proyecto, Fernando Raganato, como también el representante del Colegio de Arquitectos, Gustavo Japaz, el ingeniero de Obras Públicas del municipio, Rolando Baldasso, y el director de Obras Privadas, Guillermo Fara. Se sumó además el arquitecto Cocussa, del Arzobispado, y su colega de la empresa a cargo de las obras.
Los vecinos, entre ellos varios arquitectos y especialistas en el tema, se hicieron presentes preocupados por el futuro de este bien patrimonial de la comunidad y el temor a que las remodelaciones por delante alteraran su fisonomía.
El arquitecto Raganato, convocado por el Arzobispado para llevar adelante las tareas, planteó principalmente dos objetivos: por un lado, la necesidad de realizar arreglos estructurales en el lugar, debido a las consecuencias que sufrió el edificio a raíz del sismo de 2012. Por el otro, contener los problemas de contingencia que existirían ante una emergencia, teniendo en cuenta que la iglesia no posee más que una sola vía de escape.
Como la Parroquia, además, ha quedado chica para la cantidad de fieles que a ella asisten cada semana, el proyecto apunta a convertir las ventanas laterales de la pared Este en puertas ventanas y hacer lo mismo hacia el muro Oeste que da hacia la galería interior.
Si bien el proyecto original marcaba la existencia de dos galerías extendidas hacia los costados de la nave principal, lo cual alteraba la original fisonomía de la Parroquia, fue gracias a la participación activa de los vecinos que las obras no se llevarán a cabo tal cual estaban previstas.
Para esto fue de suma importancia la permeabilidad que mostró Raganato en relación a las consideraciones que manifestaron los vecinos especialistas en el tema, como lo hicieron, entre otros, el arquitecto Japaz o sus colegas Elena León o Estela Mazza.
En conclusión y ante el acuerdo generalizado, quedará anulada la galería de la vereda Este, lo cual se traduce en que desde calle Italia se seguirá viendo la pared actual de la iglesia sólo que en lugar de pequeñas ventanas habrá puertas ventanas que respetarán el estilo existente en el conjunto de la parroquia -con antepecho de madera-.
También se correrán los arbustos de calle Italia para despejar la visual y permitir que las personas puedan seguir la misa conectados con el interior del edificio. En cuanto a la galería de la pared Oeste, serán ubicados algunos cipreses en el patio interior y esperamos que se conserven los eucaliptus históricos y en buen estado que se encuentran detrás de la iglesia y hacen a la fachada de la misma.
Misa en la escuela
Hasta fin de mayo las misas tendrán lugar en la Escuela Francisco Correas, en el mismo horario, y está previsto que continúen allí a menos que surja alguna eventualidad que será comunicada oportunamente. En un momento se habló de la Capilla La Merced o del Salón Para Todos, pero para ello tendrían que coordinarse las actividades actuales con los horarios de misa.
Vecinos en acción
Dos notas fueron presentadas en su momento al municipio. Una corrió por cuenta de las uniones vecinales y otra por parte de los chacrenses que juntaron firmas pidiendo que los arreglos estructurales de la iglesia no alteraran su fisonomía, tan querida por todos y que constituye un bien patrimonial para la comunidad.
La voz del intendente
Sobre las obras de remodelación en la iglesia de Chacras, el intendente Omar De Marchi opinó que ha habido diálogo suficiente entre las tres partes: la municipalidad, la propia iglesia y los vecinos. “Entendemos que la gente de la parroquia está dispuesta a cumplir con toda la rigurosidad técnica que implica la obra y sus respectivas presentaciones formales; respetando y rescatando la opinión de los vecinos”, aseguró De Marchi.
Aún cuando el intendente señala que Luján cuenta con una política de protección patrimonial, deberíamos preguntarnos si estos instrumentos son suficientes a la hora de resguardar nuestro legado.
