El pasado mes de octubre estuvo por nuestros pagos la Orquesta Atípica de Catalinas Sur, conformada por vecinos del Barrio de La Boca, Buenos Aires, y llenó nuestra plaza de música, colores y mucha alegría.
Fotos gentileza Germán Ríos
Fue en el marco de la visita que la orquesta del elenco de teatro comunitario Catalinas Sur hizo a nuestra provincia.
Previamente se presentaron en el Espacio Julio Le Parc, con su obra “Quien es el Jefe”, una combinación desusada de teatro y música. Al otro día, La Atípica presentó su obra en el Polideportivo de Junín, con el apoyo de los grupos “Mira pal Este” y “Los Soñadores de la Ramada”, quienes también forman parte de la Red Mendocina de Teatro Comunitario, junto al Chacras para Todos y varios grupos más.
Luego de ser homenajeados por la gente del elenco comunitario local en la escuela de Las Vegas, Potrerillos, que prestó sus instalaciones para ello, finalmente el 12 de Octubre colmaron la plaza de Chacras con toda su algarabía. Los vecinos, de para bienes. Esa noche hubo canto y baile general.
Fue una tarde inolvidable. El ensamble “Tulumayu” del Chacras para Todos inauguró la fiesta comunitaria con su música popular latinoamericana. Luego la Orquesta Atípica de Catalinas Sur presentó su espectáculo “La Atípica en concierto”, un show de alta calidad artística.
Y es que la Atípica es una orquesta divertida, disparatada e impredecible que capta la atención del público a cada instante. Para cerrar, el grupo Chacras para Todos presentó su obra colectiva de teatro comunitario “De muros a puentes”, ya en un tono más reflexivo, que invita a la comunidad a interpelar sus prácticas y modos de vida. “La propuesta de nuestra obra es un cambio en la manera de relacionarnos en nuestra comunidad, propiciamos tender puentes entre los vecinos, puentes que se construyen a partir de la justicia, el amor, la solidaridad, el arte”, explica Tuti Gadea, del elenco local.
De la mutual a los escenarios del mundo
El grupo Catalinas Sur se inició cuando sus integrantes participaban de una asociación mutual que, en los años setenta y desde la escuela del barrio, organizaban y desarrollaban actividades con otros vecinos.
La última dictadura militar prohibió la presencia de la mutual en la escuela, pero sus integrantes conservaron la costumbre de reunirse en un espacio aglutinante fuera de ese ámbito, orientando sus actividades a la expresión artística, sosteniendo la fuerza del sentido solidario, la participación grupal y la memoria colectiva. Cuando se abrió el proceso democrático el grupo salió a la calle y “ocupó” cada vez más la plaza de su barrio.
Hoy en día participan de este proyecto cerca de 250 vecinos, quienes forman parte del elenco que da vida a diferentes espectáculos y participan de talleres, todo ad-honorem. “Somos un grupo que cree en un mundo más justo y solidario, al que podemos arribar con el trabajo en conjunto y comunitario”, explican.
Entre tantos eventos, los porteños fueron agasajados con un día de montaña, en Las Vegas, Potrerillos. Pollo al disco cocinado por los expertos cocineros del Chacras para Todos y un buen vino mendocino, ¡por supuesto!