En homenaje a los Juegos Olímpicos de Londres 2012 iniciados este 27 de julio y que culminarán el 12 de agosto, recordamos al primer deportista mendocino olímpico de la historia: el ciclista Cosme Damián Saavedra en Paris 1924. Experiencia que repitió cuatro años después en los Juegos Olímpicos de Amsterdam, Holanda, en 1928.
Por José Félix Suárez.
De los cuatro hermanos Saavedra que se dedicaron al ciclismo Cosme y Remigio fueron los que más se destacaron porque en el inicio de las competencias de ruta en la provincia y el país en las décadas del 20 y del 30 no solo alcanzaron proyección local sino también nacional e internacional. Pese a que también tuvieron sus méritos los dos restantes Carmelo y Victorio nunca lograron el nivel de aquellos. Aunque Cosme y Remigio, que se llevaban una diferencia de 10 años, se fueron a correr muy jóvenes a Buenos Aires figuran entre los pioneros del deporte del pedal en Mendoza junto a otras recordadas figuras del pasado.
En el libro El Ciclismo en Mendoza, un valioso trabajo que fuera editado en 2006 por los autores Rodolfo Mikkan (textos) y Santiago Piazarro (fotos), se recuerda por ejemplo que en 1924 se unió Godoy Cruz-San Martín ida y vuelta sobre un recorrido de 100 kilómetros y que en 1925 se corrió por primera vez la Mendoza-San Juan que se largó a las cuatro de la mañana y terminó pasadas las seis de la tarde por lo que el ganador necesitó 14h 12m para completar esa distancia estimada en 180 km. Se señala además que entre las décadas del 30 y del 40 comenzó la disputa de clásicas carreras como la Doble Villavicencio, la Doble Rivadavia, la Doble Tupungato, la Doble Borbollón, el Circuito Tapón de Sevilla, la Doble San Rafael, la Doble Cacheuta, el Circuito Alto Godoy Cruz, la Doble Pastal y otras más que convocaban gran cantidad de gente a la vera del camino. Los ciclistas se desplazaban obviamente en los pesados rodados de esas épocas y por lo general sobre rutas de ripio y tierra, huellas polvorientas y sin una adecuada visibilidad, que se cubrían de agua y barro cuando llovía con intensidad.
Hacia 1925 el diario Los Andes publicó en sus páginas de deportes la noticia de la inauguración del “velódromo de cemento”, lo que constituía un gran adelanto según referían esas mismas crónicas, en el mismo estadio de fútbol del Club Sportivo Independiente Rivadavia en el parque General San Martín. La iniciativa se debía al entonces presidente de esa institución Bautista Gargantini a su regreso de un viaje a Europa donde había quedado impresionado por un escenario de esas características para la práctica de ese deporte.
El gran Cosme
Cosme Damián Saavedra, nacido en 1901 en Godoy Cruz, aprendió a andar en bicicleta a los 18 años y a correr a los 21. De gran físico, una enorme voluntad, tenaz y porfiado como nadie, con una salud de hierro, se destacó desde sus primeras pedaleadas como un ciclista de punta y de gran resistencia. Cuando Mendoza le resultó chica por la falta de rivales se radicó en Buenos Aires donde debutó con un espectacular triunfo en las 10 Horas a la Americana en equipo con Antonio Del Gesso. Mas tarde ganó en seis oportunidades la Rosario-Santa Fe y también seis veces una de las pruebas más importantes del país y que todavía se disputa: la Doble Bragado de la que resultó vencedor en 1924. Se clasificó campeón argentino de resistencia en 1926, 1931 y 1933 (en los dos últimos escoltado por su hermano Remigio) y en otra demostración de su increíble capacidad fue campeón rioplatense de ruta entre 1926 y 1930. En 1933 se clasificó campeón argentino de velocidad pura.
30mo. en París
En los Juegos Olímpicos de París que se realizaron de 1924 con la presencia de 3.089 atletas (2.954 hombres y 135 mujeres) y donde la Argentina logró en polo la primer medalla de oro de su historia, Cosme ocupó el 30mo. puesto entre 59 participantes en la prueba individual de ruta de 188 km. de recorrido. Además, en París ‘24 fueron medalla de plata los pugilistas Héctor Méndez y Alfredo Copello y el atleta Luis Brunetto (salto triple) y medalla de bronce los boxeadores Pedro Quartucci y Alfredo Porzio.
Cuatro años después, cuando ya había instalado a su familia en Buenos Aires, Cosme volvió a cruzar el Atlántico con el equipo argentino que participó de los Juegos Olímpicos de Amsterdam, Holanda 1928. En aquellos juegos fueron medalla de oro los boxeadores Arturo Rodríguez Jurado (categoría pesado) y Víctor Avendaño (medio pesado) y el nadador Alberto Zorrilla (400m libre), medalla de plata los boxeadores Víctor Peralta y Raúl Landini y la Selección Argentina de Fútbol que cayó en la final frente a Uruguay y medalla de bronce la formación de esgrima con Roberto Larraz, Raúl Anganuzzi, Carmelo Camet y Luis y Héctor Lucchetti.
Como se presumía, el ciclista mendocino hizo valer su experiencia anterior y terminó en la 15ma. posición en la competencia individual de ruta de 168 km. También intervino en una contra reloj por equipos junto a José López y Francisco Bonhevi en la que terminaron octavos. Cosme hizo una última presentación en Europa y fue 6to. en el Mundial de Aficionados de Budapest. Como consecuencia de un accidente que sufrió en la Av. Callao de Buenos Aires se retiró de la actividad y se dedicó al comercio de bicicletas y a la organización de carreras de ciclismo. El gran Cosme al que se identificó como “el padre del pedal” falleció el 3 de julio de 1967 a la edad de 66 años.
