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Innovación institucional

El desdoblamiento de las elecciones por jurisdicción –nacional, provincial y municipal- es una innovación institucional que en Mendoza se planteó por primera vez a mediados de los años noventa en la Cámara de Diputados por iniciativa del entonces diputado Lucio Duarte, proyecto que en aquella oportunidad no interesó a los legisladores ni al Ejecutivo porque la tradición de “jugar con el arrastre de votos” desde los liderazgos mayores estaba muy arraigada. Una iniciativa similar fue impulsada nuevamente en uno de los proyectos de Reforma Política que envió a la Legislatura el Poder Ejecutivo en medio de la crisis de 2001, aunque el destino final fue similar.

Es decir que había antecedentes legislativos sobre el tema cuando el intendente Fayad, aunque por otras razones de estrategia política, tomó la decisión de desdoblar la convocatoria para las elecciones de medio tiempo en el municipio de Capital. El desdoblamiento no está regulado pero la ley vigente tampoco lo prohíbe y en consecuencia el intendente capitalino actuó de hecho generando un antecedente que oxigena el viejo régimen electoral de la Provincia y que seguramente, a partir de ahora, será un recurso que tendrán en cuenta otros dirigentes porque ayuda a la diversidad política y a enfrentar hegemonías demasiado pesadas para nuestra democracia política. En consecuencia, sería deseable que el escenario político provincial tuviera con mayor frecuencia rasgos análogos de imaginación y creatividad que aunque sea de manera indirecta ayuden a avanzar con mayor rapidez en los procesos de democratización. No siempre las mejores instituciones aparecen precedidas por una ley.

Desdoblar las elecciones por jurisdicción, claramente ayuda al ciudadano a fijar la atención en el tipo y nivel de problemas que efectivamente le interesa en cada caso. Ayuda a que no se mezclen las propuestas ni las imágenes; es más difícil que “los líderes de las ligas mayores”  interrumpan en escenarios ajenos e intenten arrastrar votos confundiendo al elector desprevenido. Definitivamente el desdoblamiento a nivel municipal alienta la aparición y renovación de nuevos liderazgos y a poner en la agenda municipal los problemas cotidianos y cercanos al ciudadano, los de su barrio, los de su distrito y en definitivas los de su departamento.

Es frecuente que se objete el desdoblamiento por razones de costo; pero ¿quién ha dicho que vivir en democracia sea más barato? Si estamos de acuerdo que queremos vivir en libertad, que deseamos reconstruir una sociedad solidaria y más justa y que queremos un Estado que redistribuya y sea el garante de políticas de equidad, tener claridad para qué hay que votar y a quién hay que elegir es una condición, aunque no suficiente, seguramente necesaria. En consecuencia, la calidad democrática no tiene que ver con el costo de un proceso electoral sino con las posibilidades reales y efectivas que tiene la ciudadanía para elegir sin condiciones un programa, una política y un candidato…

Voto electrónico

Cuando el proceso electoral se hace más transparente y simple también se pueden ensayar nuevas herramientas y tecnologías como el voto o el escrutinio electrónico porque se simplifica también la evaluación de los ensayos o innovaciones que en tanto prácticas sociales están fuertemente afectadas por la cultura ciudadana. En consecuencia, desde mi perspectiva, el reciente ensayo que implementó el municipio de Capital ha llegado para quedarse ¿Cuántos intendentes están en estos momentos pensando en repetir la iniciativa, aunque sea por otros motivos? Si pudiéramos averiguarlo quizás nos sorprenderíamos…

Walter Cueto

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