Categoría | Info general

La Leñera, experiencia comunitaria

Recorriendo las villas cordilleranas encontramos medios de comunicación instaurados en estas comunidades y defendidas a rajatabla por sus pobladores. La Leñera, radio de frontera escolar-comunitaria, es el medio de expresión y entretenimiento de quienes viven en Las Vegas. Algunos de sus hacedores cuentan a Correveidile su historia, su lucha y su inmejorable presente. Un ejemplo de unión y organización comunitaria.

Por Carolina Balmaceda

¿Cómo nace “La Leñera”?
Mónica:
La radio empieza por el `99. Luego los chicos más grandes de la escuela y otros de la comunidad presentaron, con quien en ese entonces era el director, un proyecto para que les den un subsidio internacional por medio de la Asociación Emprender Mendoza (AsEM).
Sergio: Es un fondo común que hace AsEM para proyectos comunitarios. El fondo se constituye por varias empresas.
Mónica: Recibieron el subsidio y colocaron la radio en el lugar elegido por todos: la escuela. Con el dinero se compró un equipamiento nuevo con el que funcionó hasta 2006.

¿Y antes cómo funcionaba?
Mónica: Los chicos hacían talleres de radio, programas escolares. Se jugaba mucho porque la radio no tenía alcance, llegaba sólo a la casa vecina. Ese equipito sigue estando en la escuela, pero ya nadie lo usa. ¡En cualquier momento lo sacamos a relucir!
Sergio: Ahora, como la radio no esta en la escuela, la idea es que desde la escuela se vuelvan a hacer programas con ese equipito y si la señal llega hasta La Leñera haríamos una retransmisión. También queríamos usarlo como radio móvil, hacer radio abierta los domingos en la calle. Con músicos, artistas….

Una vez que tuvieron equipo nuevo la radio empezó a funcionar como tal…
Mónica: Claro. En un principio los aparatos estaban dentro de la escuela, en un aula. Cuando llegó el equipamiento más grande se lo trasladó a La Leñera. Es una habitación chiquita que primero fue aula, después se usó para guardar la leña y luego guardaban ahí los fardos de pasto para los animales de la granja. Convocamos a la gente de la comunidad para ponerle
nombre a la radio y eligieron “La Leñera”.
Laurita: Una vez que se instalaron los equipos la señal ya llegó hasta El Salto y Potrerillos, o sea que se cubren todos los altos valles.

¿Cómo era la programación?
Mónica: Dos veces por semana los chicos de la escuela tenían programa (distintos grupos), después de lunes a viernes por la noche y los sábados había programas de gente de la comunidad.

¿Cómo se manejaba -y se maneja- eso de quiénes hacían programas?
Laurita: Había una comisión que se reunía, pero digamos que era libre. Hoy hay un grupo y nos reunimos los miércoles.
Mónica: Todo el mundo puede participar pero nosotros tenemos en claro qué queremos lograr con la radio: revalidar lo nuestro. Queremos que tenga música que tenga que ver con nosotros y con las distintas edades. El perfil de la radio es eso, ser comunitaria y revalidar lo nuestro.
Laurita: También la idea es integrar todas las diferentes visiones que hay en el lugar.
Mónica: Hay mucho y muy variado acá… lo que se buscó es crear un patrón y dentro de él no tener ningún programa de política. La idea es transmitir lo que pasa en el lugar: con los vecinos, la escuela, el micro. Eso es lo fuerte, lo local y después lo que la gente tenga interés.

Desde el 2006 hasta este año hubo un gran parate en la radio y después mudanza… ¿A qué se debió?
Mónica: La radio se mudo como consecuencia de ese parate. Hubo muchas cuestiones más que nada de gestión, administrativas. Dirección General de Escuelas (DGE), la directora, en
definitiva se paro la radio durante tres años
Sergio: Vino una directora suplente que estuvo como tres años acá y cuando la gente y la comunidad se le meten en la escuela pierden poder y les molesta. Hubo una gran incapacidad
de ver la radio como herramienta para los chicos, para la comunidad. Buscaron mil excusas para cerrarla y perdieron de vista cual era el propósito de la misma. La radio había empezado a darle eje a un montón de cuestiones sociales de la comunidad que antes se manejaban desde la escuela.
Laurita: Viene a dirigir una persona que no vive acá, no es de la zona y no tiene intereses en integrarse a la comunidad; entonces cerró la radio, cerró la escuela. El lugar que era núcleo de reunión de la comunidad lo cierra, porque ella no entendía y no quería integrarse.
Mónica: A quienes vienen de afuera les cuesta convivir con esto de lo comunitario. Entonces quieren llegar e imponer cuestiones y no es fácil integrarse en una comunidad heterogénea en este momento. Diez años atrás en la escuela había muchos niños que eran hijos de los lugareños con alguna que otra gente que venía de Mendoza o Buenos Aires. Hoy encontrás mucha más gente que ha venido de esos lugares y también de Bolivia. La comunidad ha crecido mucho, pero la gente a veces es muy despectiva y se refieren a las distintas personas con términos como: los gauchos, los hippies, los porteños, los bolitas… y en realidad es un crisol. Uno tiene que convivir porque venís acá a intercambiar cosas. Creo que de eso se trata, no es sencillo trabajar en lo comunitario.
Laurita: Y además se suma la gente de fin de semana, que tiene casas acá y va y viene.

¿Cómo se produce el regreso de La Leñera al aire?
Mónica: La DGE emite un dictamen diciendo que la radio no podía funcionar más en la escuela, salvo que la directora fuese la encargada de la programación. Entonces tras eso decidimos separarnos. Se hicieron muchas cosas, hasta la radio abierta en la puerta de la escuela con la directora dentro.
Laurita: ¡Y terminó viniendo la policía! La idea era que la radio quedara en la escuela. Se hizo de todo. Pero llegó un punto en que ya no se podía más y se tuvo que buscar otro lugar.

¿Y ahora dónde están ubicados?
Mónica: Estamos en la casa de un vecino, Jorge Marchetta.
Laurita: No encontrábamos lugar y él prestó su casa. Es un vecino que está muy comprometido con la comunidad.

¿Trabajan con algún tipo de publicidad, para afrontar los gastos?
No (al unísono). Es una decisión que se tomó entre todos. Somos totalmente independientes.
Mónica: La familia Marchetta se está haciendo cargo de los gastos de la luz. Ahora estamos haciendo unos bonos contribución como para obtener algún fondo.
Laurita: La idea de la radio es ser escolar-comunitaria. Por más que la radio salga de la escuela, primero que nada nos religamos a las escuelas. Y ser comunitaria significa no ser comercial, no tener publicidades.

¿Y el municipio les brinda alguna ayuda?
Laurita: La municipalidad en la zona no actúa. Apoyo no hay nunca. Hemos hecho muchos eventos e intentado con otros, pero en vez de tratar de ver la forma para que podamos hacerlo, directamente vienen y nos cierran.
M: Tanto para turistas como para la gente de acá es necesario que haya cosas para hacer. Si no cuando viene alguien y nos pregunta qué pueden hacer les terminás diciendo “y… alquilate un caballo”.

Hacen La Leñera:
Erica Stradiotto, Jhonatan, Javier Llugany, Miriam Chinigioli, Jorge y Cristina Marchetta, Sergio Salido, Mónica Nocetti, Sergio Cortez, Laura Escofet, Marina Cubillos, Pedro Maeda, Esther, Paulo y lo chicos de Deportes: Tomás, Germán, Pity, Rodri, Matías, Esteban y el pequeño Camilo.

5
6
7

Deje su comentario