Archivo | marzo 27th, 2018

Monzón: La biografía definitiva -->

Monzón: La biografía definitiva

Manos de barro, puños de gloria y tragedia

Por José Félix Suárez – Especial para Correveidile

Con sus manos rotas, consecuencia de la mala alimentación que recibió durante su infancia, con las que alguna vez hizo la mezcla, amasó el barro y empujó la carretilla para construir su primer   rancho de paredes de adobes en su Santa Fe natal, Carlos Monzón edificó también con el paso del tiempo su estatua de campeón del mundo, único e irrepetible, según el relato del periodista y escritor Carlos Irusta en su libro de 465 páginas editado en noviembre de 2017 por Planeta.

“Monzón: La biografia definitiva” fue presentado en el Salón Cultural Islas Malvinas de Las Heras, donde el periodista Raúl Adriazola se lució como moderador. Porque con esas manos de barro, que se convirtieron en sus fuertes puños de KO, descubrió primero la gloria y la fama, el brillo y el prestigio, la fiesta y el glamour, el cine y las estrellas, el amor y el placer. Pero  años más tarde, con  esos mismos puños plenos de vigor y potencia lo castigó el destino cuando conoció la cárcel y vivió entre rejas para purgar la condena por el asesinato de su última pareja, Alicia Muñiz. Hasta que en el final de sus días en un luctuoso accidente perdió el control del vehículo que conducía en una salida transitoria del penal y que apagó para siempre su vida.

La completa biografía de Carlos Irusta le exigió ocho meses de trabajo e investigación y es la síntesis más perfecta del duro y difícil recorrido de los 53 años de existencia de Monzón. Un luminoso y oscuro laberinto donde convivieron por igual, la alegría y la tristeza, el éxito y el fracaso, el bienestar y la pobreza, la fortaleza y el dolor. El todo y la nada del campeón mundial argentino más grande todos los tiempos relegando a un segundo lugar a nuestro Pascualito Pérez, según la autorizada opinión de Irusta, que en nuestra provincia se reencontró con viejos y entrañables amigos como Pancho Wolhfart, Osvaldo Corro y el autor de esta nota, con quien  compartió años de trabajo en la revista El Gráfico.

-¿Por qué este libro, Carlos?

-Porque Monzón fue una figura trágica que merecía una biografía definitiva. Con el compromiso de presentar un relato fiel, sagaz y objetivo. En este libro no hay mito ni leyenda, solo una historia muy humana para contar y creer. Para descubrir un personaje con sus errores y virtudes. Que nunca fue un boxeador ni carismático ni taquillero. Es la historia de un muchacho que se abrió camino a las piñas abajo y arriba del ring. Muy humilde y que llegó muy lejos.

-¿Fue amigo personal de Monzón?

-De ningún modo, no puedo hablar de amistad. Sí de una excelente relación, profesional y respetuosa. Cada uno en su lugar: Monzón boxeador y yo periodista. Lo seguía siempre por mi actividad en El Gráfico y mis tareas en la radio. Aunque más de una vez nos tratábamos como tocayos.

-¿Cómo y cuando lo conoció?

-En el gimnasio del Luna Park cuando recién empezaba. Como mi papá era santafesino y entrenador ahí, nació una relación afectiva con Monzón y su entrenador Amílcar Brusa. Estuve en muchas de sus grandes peleas.

-¿Cómo hizo para reunir el material para el libro?

-Apelé a todos mis recursos de periodista, a todas las fuentes posibles. Testimonios de amigos, recortes de diarios, videos, libros, mis vivencias personales, mis charlas con Monzón. Hice trabajar mi memoria para reconstruir distintos hechos.

-¿Cuál resultó la parte más grata del libro y la más ingrata?

-La más grata el recuerdo de sus grandes victorias, su relación de casi padre-hijo con don Amílcar Brusa, su romance con Susana Giménez, su trabajo en “Soñar Soñar”con Leonardo Favio, su amistad con Alain Delon, su perfil de gran campeón bajo la tutela de Tito Lectoure. Su relación con Raquel Welch, Palito Ortega y el Negro Olmedo. La más ingrata, el episodio con Alicia Muñiz y el accidente cuando se encontraba en libertad condicional.

FOTOS: Gentileza de Jorge Atencio.

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Gourmetur 2018: Sabores de Latinoamérica en Mendoza -->

Gourmetur 2018: Sabores de Latinoamérica en Mendoza

Moles mejicanos, ceviche y rocotos peruanos, tapados hondureños, pasteles, sopas y dulzuras chilenas, carnes argentinas junto a pastelería innovadora con raíces precolombinas y platos aptos para celíacos son algunas de las propuestas de Gourmetur 2018.

En solo dos días, habrá 15 clases magistrales y el anticipo por la celebración del Día Mundial del Malbec. Abierta al público en general y orientada especialmente a estudiantes, profesores, cocineros y empresarios en el sector de gastronomía, hotelería y sommelerie.

Será el 10 y 11 de abril en el Ángel Bustelo. Consultas: Escuela Internacional Islas Malvinas, Roque Sáenz Peña 745 de Ciudad, islasmalvinas@eim.esc.edu.ar, 4203204 o 4381441.

Cuatro son los chefs que nos visitan de México, dos provienen de Perú, dos chilenos, cinco argentinos, dos paraguayos, una cocinera boliviana y un chef hondureño. Cada uno de ellos -en forma individual o en duplas – ofrecerá una clase magistral donde compartirán un plato típico de alguna de las regiones de su país junto con experiencias personales en la profesión.

Declarado de interés turístico provincial por el Ente Mendoza Turismo, Gourmetur 2018 está organizado por la Escuela Internacional Islas Malvinas. El evento de Mendoza, integra las actividades que se efectúan en el marco de la Unión Latinoamericana de Entidades de Enseñanza Superior -ULADES- y con anterioridad se llevó a cabo en Bolivia, Perú, Chile y Méjico.

Abierto al público en general, Gourmetur está especialmente orientado a estudiantes, profesores, cocineros y empresarios del área de la gastronomía, el turismo, la hotelería y la sommelerie.

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