Archivo | abril 20th, 2017

María Silvina Piti D’ Elía: Símbolo de la mujer en el deporte -->

María Silvina Piti D’ Elía: Símbolo de la mujer en el deporte

Por José Félix Suárez  – Especial para CORREVEIDILE

La elección de nuestro periódico de elegir a María Silvina Piti D’ Elía como el símbolo del deporte femenino en este número dedicado al mes de la mujer, es consecuencia no solo de una brillante trayectoria como jugadora de hóckey sobre césped, sino también el reconocimiento a su línea de conducta, a la lealtad de sus principios éticos y morales y a sus muy firmes convicciones, que la llevaron hace casi dos años a renunciar a Las Leonas, acaso en el mejor momento de su larga y exitosa campaña en la Selección Argentina en el ámbito internacional.

Por sus condiciones, calidad técnica, temperamento, amor propio, esfuerzo y dedicación, por su dignidad como persona y como deportista, honestidad y bajo perfil, Piti se convirtió en un ejemplo a seguir. Sin duda un espejo donde mirarse, un modelo donde apoyarse, un símbolo a cuidar, una triunfadora para igualar. Quizás también una estrella muy luminosa para alcanzar en el cielo del deporte donde la mujer también es protagonista con la misma entrega, generosidad y pasión de todo deportista.

Piti heredó de su mamá Cristina Carimato, delantera inolvidable de Marista Rugby Club, la misma cuna deportiva de Silvina y de su hermana Florencia, el amor y la pasión por el popular deporte de las llamadas “falditas cortas”, que comenzó a desarrollar cuando apenas tenía ocho años de edad. Es como si hubiera nacido con la bocha bajo el brazo porque su infancia no se puede imaginar de otra manera.

Siempre “dale que dale”, con mucho sacrificio y dedicación, a la par de los estudios, progresando y mejorando desde su función de defensora y viajando todas las semanas a Buenos Aires cuando solo tenía 16 años y ya había sido convocada para formar parte de la Selección Argentina Juvenil. Luchadora y aguerrida como la gran Leona en que se convirtió con el paso del juego y del tiempo, Piti fue a partir del 2007, la jugadora indiscutida de la selección mayor, a la que honró durante tantos años con un increíble palmarés de títulos y triunfos. Muchos de ellos compartidos con otra mendocina de raza y corazón, Ana Macarena Rodríguez, igual de talentosa en la selección donde reinaba la exquisita Lucha Aimar.

Los títulos

Un rápido repaso a sus logros y coronas nos recuerda lo siguiente en su marcha ascendente y triunfal, siempre a nivel internacional con la Selección Argentina.

En 2003: medalla de oro Campeonato Sudamericano en Santiago de Chile; 2004: medalla de oro en los Juegos Panamericanos Junior de San Juan de Puerto Rico; 2006: medalla de oro en los Juegos Odesur de Buenos Aires; 2007: -a partir de ahora con Las Leonas- medalla de plata en el Champions Trophy de la Argentina; 2008: medalla de oro en el Champions Trophy de Monchengladbach en Alemania; 2009: medalla de oro en la Copa Americana de Hamilton en Bermudas; 2010: medalla de oro en el Champions Trophy de Nottingham de Inglaterra; 2010: medalla de oro en la Copa del Mundo de Rosario en la Argentina; 2011: medalla de plata en el Champions Trophy de Amsterdam en los Países Bajos; 2011: medalla de plata en los Juegos Panamericanos de Guadalajara en México; 2012: medalla de oro en el Champions Trophy de Rosario en Argentina; 2012: medalla de plata en los Juegos Olímpicos de Londres en Inglaterra; 2013: medalla de oro en los Juegos Panamericanos de Mendoza en la Argentina; 2014: medalla de bronce en la Copa del Mundo de La Haya en los Países Bajos y 2014: medalla de oro en el Champions Trophy de Mendoza en la Argentina.

La renuncia

Fue en abril de 2015 cuando se conoció oficialmente la decisión de María Silvina D’ Elía de renunciar a las Leonas que entonces dirigía el entrenador Santiago Capurro después de haber completado 215 partidos internacionales. Ya se había producido el alejamiento de Luciana Lucha Aymar, quien entendía que había cumplido su ciclo.

También había renunciado Rosario Luccheti, la primera en reconocer públicamente la mala relación de la mayoría de las jugadoras con las autoridades de la Confederación Argentina de ese deporte. Se recuerdan las palabras de Piti cuando anunció su renuncia: “Quiero aclarar que mi decisión de renunciar al seleccionado no es por motivos personales. Hoy no me siento identificada con las formas de este proceso y por este motivo he decidido dar un paso al costado. No quiero defraudarme a mi misma, a mis compañeras y a la camiseta que me llevó a lo más alto que puede aspirar un deportista”.

El presente

Piti está radicada actualmente en Buenos Aires donde defiende los colores de la institución que siempre la cobijó en ese medio:  GEBA -Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires–. A fines de febrero de este año Piti se reencontró con los mendocinos al participar del Torneo Vendimia que se adjudicó su equipo. Fue recibida con mucho cariño por el público.

En charla con Correveidile, Silvina comentó: “El año pasado estuve casi seis meses sin jugar pero nunca pensé en dejar la  competencia oficial. Sinceramente luego de la salida de Las Leonas necesitaba un pequeño descanso, sin embargo nunca me alejé de la actividad. Me vinculé como entrenadora al club CISAP y lo hice con mucho entusiasmo, muy comprometida con lo que hacía. Esos meses me sirvieron para reflexionar, para ordenar mis ideas, para poner en claro mi futuro. Así es que decidí regresar a GEBA que es como mi casa, con la alegría de que ahora pude jugar nuevamente en mi provincia. Me puso muy feliz el reconocimiento de la gente, el apoyo de mi familia y de mi hermana Florencia. Sinceramente me encanta el cariño que recibo y lo agradezco”.

Finalmente señaló sobre su posible regreso a Las Leonas, lo que se ha comentado mucho en estos días, porque a mediados de este mes de abril habrá elecciones en la Confederación Argentina de Hóckey y como presidente suena el nombre de Gabriel Minadeo quien la conoce muy bien desde su época de entrenador: “Desde que renuncié cada tanto escuché mi nombre entre los posibles retornos a la selección. Ni siquiera lo pienso porque nadie me ha llamado ni hablado conmigo. Por lo pronto estoy en otra etapa de mi vida y de mi carrera, tengo otras prioridades, otros compromisos. Me siento bien, muy feliz, con mucha tranquilidad. Si me vuelven a llamar sinceramente lo tendría que pensar y meditar de la mejor manera. Antes hubiera vuelto a ciegas, pero ahora no lo sé. Por supuesto que me llena de orgullo volver a ser tenida en cuenta. Pero nada más que eso”. Piti D’ Elía, aquella Leona de garra olímpica y mundial, la elegida por Correveidile por sus condiciones, ejemplo y trayectoria como la deportista destacada en el mes de la mujer.

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Luciana Sabina: La chacrense que hace historia

Autora de “Héroes y villanos”, esta joven lujanina indagó en los protagonistas argentinos del siglo XIX y escribió un libro resonante publicado por Sudamericana. Ida y vuelta en preguntas y respuestas con esta estudiosa del pasado muy presente en la actualidad.


-Naciste en Chacras y cursaste aquí tus estudios… ¿Qué representa este distrito para vos? ¿Qué recuerdos de ese pasado ligado a la infancia atesorás?

-Nací en Chacras, mi familia vive en el pueblo hace unos cien años, a punto de que uno de mis tatarabuelos plantó los inmensos pinos de la Plaza. Cursé mis estudios primarios en la Escuela Teresa O’Connor y los secundarios en la Panchito. Chacras representa mis raíces, mi lugar en el mundo. Estoy muy orgullosa de ser parte del pueblo. Recuerdo con mucho amor los veranos de mi infancia, las guerras de carnaval entre grupos de chicos y el pasar horas con mi bisabuela sentadas en la puerta de casa mirando el movimiento del pueblo, en plena calle Italia. También atesoro el recuerdo de los vecinos que ya no están y que poblaron mi infancia, es imposible no verlos de algún modo en las puertas de sus hogares cada vez que paso.

-¿Cómo surge tu pasión por la historia y qué hechos llaman tu atención? Tu mirada está puesta en la historia argentina, ¿en qué hechos o aspectos?

-En la Francisco Correas tuve una gran profesora de Historia, Elisabeth Lúquez, y desde los 13 años supe que era lo que quería estudiar. Mis intereses principales están en el marco de la Historia Argentina del siglo XIX, sobre todo en la figura de Domingo Faustino Sarmiento.

-Estudiaste en la UNCuyo. ¿Motivada por qué razones decidiste escribir y publicar tu libro “Héroes y Villanos”? ¿Qué podemos encontrar en sus páginas?

-La idea principal del libro es respetar el estatus científico de la historia. Muchos utilizan la historia como un panfleto militante, cuando el historiador no debe realizar recortes de diversos aspectos para demostrar lo que cree, sino buscar la verdad, reconstruir un hecho a partir de los registros existentes. El libro habla de héroes y villanos porque todos, en cierto modo, tuvieron algo de ambos. El maltrato dado, por ejemplo, a la figura de Sarmiento es el mejor ejemplo de cómo los historiadores pueden manipular el conocimiento. Este libro busca mostrar a los hombres y mujeres de nuestro pasado como lo que fueron: seres humanos con virtudes y errores, sin que eso quite valor a sus logros, todo lo contrario.

-¿Por qué pensás que este material ha resonado tanto a nivel nacional?

-Al ser publicado por una editorial de gran peso fue un proceso natural, creo. También el uso de las redes sociales, particularmente twitter, ayudó a que el material tomara impulso, ya que muchos periodistas de distintos lugares del país se interesaron y eso terminó volcándose en algunos medios.

Fragmento de “Héroes y villanos. La batalla final por la historia argentina”, de Luciana Sabina (Editorial Sudamericana)

“Los últimos años del Libertador transcurrieron en una casa de dos plantas, blanqueada. La pared de su dormitorio ostentaba el sable corvo con que sometió a España. Cuidaba el jardín poniendo esmero mientras las cataratas nublaban su vista. Hasta último momento habló sobre Cuyo y su gente.

Nunca dejó de amar a Mendoza -nos cuenta Rojas- y en el destierro la recordaba siempre, como si ella fuese toda la patria o algo necesario en su vida” (Rojas; 1948:134).

El 13 de agosto de 1850, de pie frente al canal de la Mancha, sintió un fuerte malestar. No quería quejarse, pero su hija advirtió todo, al acercarse lo sostuvo y preguntó si estaba bien. Con voz tranquila y en francés respondió: “Es la tempestad que me lleva al puerto”.

El sábado 17 amaneció en perfectas condiciones y se acercó a la habitación de Mercedes para que le leyese los diarios. Intolerables dolores de estómago lo atacaron y pidió acostarse en el lecho de su hija. Súbitamente solicitó a Balcarce que la alejara del cuarto, no quería que lo viese morir.

Expiró una hora más tarde, a los setenta y dos años, dejando en la orfandad a los suyos y a gran parte de América del Sur.”

Lola y Manuel Aporta, dos abuelos orgullosos.

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