Proceso y destinos

Los materiales de los neumáticos son tres: caucho, acero y fibra textil. En la planta se separarán. Con el caucho que se obtenga producirán distintos productos. El mayor uso es para asfalto. Se calcula que cada 7 metros cuadrados de asfalto se usa una cubierta. El acero se venderá para fundición. Y la fibra textil sirve, según los dueños de la planta, como combustible de alto poder calórico para los hornos cementeros. La planta podrá tratar las 4.000 toneladas de neumáticos viejos que Mendoza genera en un año y tendrá margen para tratar lo acumulado en años anteriores, ya que la capacidad será de casi 5.000 toneladas con sólo funcionar a dos turnos.

Actores

Los principales “clientes” de la planta serán los municipios, ya que son quienes en la actualidad se encargan de acopiar las ruedas. Aún no está cerrada la metodología de trabajo, pero se sabe que la empresa, que se llama M Ingeniería, no pagará por las cubiertas. Lo que hará será recibirlas gratis, inclusive ir a buscarlas y tratarlas. La empresa dueña de la planta es de capitales mendocinos. A mediados del año próximo abrirán otra planta en San Juan, con una capacidad tres veces más grande que la de Mendoza, para tratar neumáticos mineros.

Presentan, en sintonía, proyecto para acopiar las ruedas en desuso

En un proyecto de ley que presentaron los legisladores de Mendoza Mariana Caroglio y Jorge Tevez, se destaca que “unas 4.000 toneladas de neumáticos fuera de uso se generan por año en Mendoza”. “No hay normas para regular este tipo de residuos, que es potencialmente peligroso” y se propone una ley para resguardarlos y volver a utilizarlos en plazas y colegios. La iniciativa propone crear un espacio donde acopiar los neumáticos, que son residuos peligrosos porque pueden incendiarse y a la vez porque sirven de albergue para los mosquitos y roedores. No habla de tratamiento.