- ¿Hace cuánto que vivís en Chacras?
- Nací en Chacras… hace apenas 43 años… me fui cuando me casé, a los 30 años, pero decir “me fui” suena raro, porque son impostergables los domingos en la casa de mi abuela, “mi casa”, con la vueltita por la plaza después de almorzar, o las visitas en las noches frescas de verano, siempre con los primos y hermanos listos para asado o pizzas a la parrilla con una cervecita helada… Cuando me casé, me mudé al Barrio Trapiche, pero nunca me fui del todo…
- ¿A qué te dedicás?
- Trabajo en la Dirección General de Escuelas, me encanta lo que hago, me encargo de las conexiones de Internet en las escuelas, me gusta mucho mi trabajo porque me relaciona con la gente y amo llegar a escuelitas en el medio del campo o la montaña con ese “aparatito” que los conecta no sólo a conocimientos, sino a la música y los juegos…
- ¿Fuiste a algún colegio en Chacras? ¿A quiénes recordás de esa época?
- Estudié en las dos escuelas de Chacras, en la Teresa O´Connor y en la Panchito Correas… Recuerdo a todas y cada una de mis maestras: Chicha Ruiz, Marta Gómez, Señorita Cuqui, Marta Quiroga, Nelly Quiroga, Chicha Bernabo y Señorita Nieves… Y la señorita Wady Elaskar, la directora…
- ¿Un recuerdo imborrable en este lugar?
- Mis recuerdos imborrables son las “retretas” en la plaza , y el Carnaval… esa época dorada en la que no podías salir a comprar porque volvías empapada… la chaya entre vecinos en las que no se salvaban ni los abuelos… es una de las cosas de mi infancia que adoraría que mis hijos pudieran vivir…
- ¿Cuál es tu rincón favorito de Chacras?
- Mi rincón favorito de Chacras era, y es, la vereda de mi casa, los juegos y las charlas interminables con mis “amigos del alma”: Graciela, Diego, Paquito, mi hermano Emilio, Claudio, Tony, Picho… Todavía me parece oír la voz de mi mamá, o de las mamás de ellos llamándonos para cenar. También me encantaba la plaza de juegos que estaba al lado del zanjón por la calle Italia, donde está ahora la guardería de la Parroquia… la plaza, siempre… Después de adolescente, el “Cacano Bar”, punto de encuentro inevitable si queríamos pasarla bien, un clásico que extraño demasiado…
- ¿Qué cosas cambiarías del lugar en el que vivís? ¿Cómo proponés hacerlo?
- No cambiaría nada de la Chacras actual, me gusta su crecimiento, sus calles llenas de “cafecitos” y poder recorrer los negocios… Eso sí: moriría porque volvieran los “bailes a la plaza”, la espuma y las vueltas a su alrededor…y si sueño un poquito más, que mis hijos se encontraran con los hijos de “todos” aquellos que alguna vez fuimos tan felices en ella… Amo Chacras, nunca cambié mi domicilio en el DNI, amo ir votar y encontrarme con los vecinos de siempre… Voy a volver definitivamente, es mi lugar, lo sé…